Durante la firma de acuerdos en las mesas de diálogo del Instituto Politécnico Nacional uno de los principales puntos fue que no existiesen represalias contra la comunidad politécnica,  al parecer dicho acuerdo no ha sido respetado en algunas escuelas del IPN.

Laura Abril Ruz Pérez ha sido profesora de inglés del Centro de Lenguas Extranjera (CELEX) de la Escuela Superior de Turismo del IPN desde 2013. El 16 de enero del 2015 se presentó  ante la coordinación de su división para entregar los papeles de su recontratación, la cual le fue negada oficialmente bajo el argumento de que la profesora exigió que se le pagara su aguinaldo y por estar en medio de ese trámite no podía realizarse su recontratación.

Sin embargo, previo a esto y en medio del conflicto del IPN el Jefe de la Unidad Politécnica de Integración Social, el Lic. Germán Salazar, le pidió que reprobara al alumno Rodrigo Díaz, moderador de las mesas de Diálogo, la profesora se negó y denunció estos hechos ante la comunidad politécnica.

Después de que se anunciara  las mesas de diálogo el intento de reprobar a Rodrigo Díaz se le citó a la profesora para analizar las fechas de sus pagos y se le pidió que se retractara públicamente de sus declaraciones, a lo cual se negó.

En todo el tiempo que duró el conflicto en el IPN a los profesores del CELEX se les retuvieron sus pagos por más de dos meses, de seis grupos que tenía la profesora únicamente le pagaron 5, el restante era el grupo en el que cursaba Rodrigo Díaz y el cual no se lo pagaron argumentando que tenía mal los datos de un alumno, al momento de revisar quien era el alumno se da cuenta de que es Rodrigo y es cuando le solicitan que lo repruebe.

El 9 de diciembre es advertida que desde la Dirección se discutía su despido, posteriormente dos delegados sindicales le informan que la directora Interina Silvia Guadalupe Martínez, el Subdirector Académico Orlando Aguirre y el Subdirector de Servicios Educativos e Integración Social Ramiro A. Velázquez  dieron la orden de que no se le renovara el contrato, producto de las declaraciones en contra de la represión a Rodrigo Díaz.

Como último recurso la profesora asistió el lunes 19 de enero con el Lic. Ramiro A. Velázquez  a exponer su situación y pedir una explicación ante la negativa de su recontratación, Ramiro Velázquez argumentó que se le fue negada por una solicitud de pago de aguinaldo dirigida al departamento de Recursos Humanos, sin embargo la solicitud de un derecho no condiciona la contratación de los trabajadores del IPN, la profesora le pidió que le indicara en que parte de la Legislación está estipulada la negativa de recontratación por solicitud de aguinaldos y pagos retrasados, ante esto Velázquez le respondió que desconoce la legislación en su totalidad pero que se le negó su recontratación y que le hiciera como quisiera, total no la iban a volver a contratar.

Ante la falta de argumentos por parte de las autoridades del Instituto Politécnico Nacional y pese a las pruebas y documentos emitidos por la profesora Abril Ruiz su contratación ha sido negada por no permitir que existieran represalias contra un alumno suyo y por denunciar públicamente lo que se le pidió, bajo argumentos de que no puede ser contratada por exigir su salario y su aguinaldo es necesario preguntarse ¿los acuerdos de las Mesas de Diálogo realmente se están llevando a cabo? ¿O acaso despedir a los docentes que exigen lo que es justo es parte del cambio del IPN?

Por lo pronto la profesora Laura Abril Ruz Pérez ya le envió una carta al director del IPN Enrique Fernández Fassnacht en la que narra su caso, la respuesta del Director queda pendiente como una de las tantas tareas que tiene que asumir con los estudiantes, los trabajadores y el cuerpo docente, si la responde o no va a dar una muestra del interés que tiene en su comunidad.

Los estudiantes organizados del IPN irrumpieron en la segunda mitad del año con un poderoso movimiento estudiantil exigiendo que las cosas cambiaran a lo interno de la institución, sectores de profesores y trabajadores del IPN se sumaron a esa exigencia. Algunas autoridades a lo interno de la institución se niegan a que las cosas cambien, para ellos no existió el movimiento, ni sus demandas. Las represalias hacia un sector de la comunidad es un ejemplo de ello. Es una tarea pendiente que la comunidad organizada, y en lucha tendrá que atender, tal y como sucedió en 2014.