Nuevas nacionalizaciones en Bolivia

Escrito por: 

Ismael Castro

La revolución avanza

El pasado 1º de mayo se vivió un nuevo avance en el proceso revolucionario que se desarrolla en Bolivia con la nacionalización de la compañía telefónica ENTEL, filial de la italiana Euro Telecom Internacional, además de otras tres empresas petroleras. Además en este día, el Gobierno boliviano también obtuvo la mayoría de las acciones pertenecientes a la española Repsol YPF. Con estas medidas, impulsadas por el gobierno de Evo Morales, el Estado boliviano ha recuperado prácticamente el control total sobre los hidrocarburos.

Las magníficas movilizaciones llevadas a cabo por parte de los trabajadores y campesinos bolivianos significaron un duro golpe para la derecha y la oligarquía de Santa Cruz ante su intento de referéndum autonómico. Con este referéndum buscaban la autonomía de dicho departamento y, de este modo, dar un golpe reaccionario al proceso revolucionario que se vive en Bolivia. Ante este intento, la respuesta de los trabajadores fue contundente al rechazar de manera abrumadora las políticas de la oligarquía cruceña, y marcar de manera clara cuál debe ser el camino de la revolución.

Las nuevas nacionalizaciones anunciadas este pasado 1 de mayo no son mas que el resultado de las movilizaciones llevadas a cabo por las masas bolivianas, que una y otra vez han dado muestras claras de su disposición a luchar y llevar el proceso revolucionario hasta le final. La historia nos ha enseñado claramente que un proceso revolucionario no puede mantenerse por siempre: o las masas toman el poder o la burguesía y la oligarquía retomarán sus posiciones, lo cual significaría una mayor miseria y represión. Esto lo han entendido muy bien los trabajadores bolivianos, por lo cual han salido a las calles cada vez que ha sido necesario.

Esta ha sido la tónica desde que Morales asumió la presidencia de Bolivia. Esto se debe, fundamentalmente, a la base social que ha impulsado verdaderamente tanto el ascenso de Morales a la presidencia, como todas las medidas de nacionalización llevadas a cabo por éste. Miles de trabajadores y campesinos pobres han visto a Evo Morales como una alternativa clara para resolver sus condiciones de vida.

El proceso de nacionalizaciones en Bolivia indudablemente ha significado un paso al frente en el proceso revolucionario, sin embargo, estas nacionalizaciones necesitan del control total de las empresas por parte de los trabajadores a través de comités en cada fábrica que funcionen democráticamente.

Las vacilaciones de Morales en cuanto a permitir que aún sigan existiendo elementos burócratas y de derecha dentro del Gobierno, han significado un freno para el movimiento. Trotsky explicó claramente en su teoría de la Revolución Permanente la incapacidad de las burguesías nacionales de los países atrasados o ex coloniales para llevar a cabo sus tareas históricas (por ejemplo la industrialización del campo), dada su tardía llegada a la escena del capitalismo mundial. Ante esta situación, estas burguesías nacionales son totalmente dependientes de las potencias imperialistas y siempre van a estar a su servicio. La única clase capaz de resolver estas tareas históricas es la clase trabajadora y los campesinos pobres, a través de sus propias organizaciones.

Ante este proceso, la conformación de una autentica dirección revolucionaria se vuelve una cuestión fundamental para garantizar el triunfo de la revolución y crear los elementos de un verdadero Estado obrero. La presión de las masas ha hecho que Evo Morales gire cada vez más a la izquierda. Sin embargo, un papel clave lo debe jugar la COB (la central obrera más fuerte de Bolivia), haciendo un llamado a la conformación de comités obreros en cada fábrica que estén trabajando de manera coordinada. Debe tratarse de un llamado no solamente a la nacionalización de las empresas, sino al control total de éstas por parte de los trabajadores a través de estos comités obreros. A través de estos mecanismos de los trabajadores, el gobierno de Evo debe expulsar totalmente a los elementos de derecha que aún se mantienen en el Estado boliviano y expropiar a la burguesía, que todavía tiene en sus manos palancas importantes de la economía del país.

Ante los procesos revolucionarios que se han desatado en América Latina, los planteamientos hechos por Trotsky en la Revolución Permanente, toman cada vez más vida. Sólo la clase trabajadora y los campesinos pobres, a través de un partido auténticamente revolucionario que se plantee de manera clara la toma del poder y la construcción de una sociedad socialista, serán la garantía de triunfo en Bolivia y en el conjunto del subcontinente.

La Paz, 1º de mayo. El presidente Evo Morales anunció este jueves la nacionalización de la compañía telefónica Entel, filial de la italiana Euro Telecom Internacional. También firmó hoy decretos por los que el Estado boliviano recuperó la totalidad del control de sus hidrocarburos a través de la recompra de las acciones de la española Repsol YPF, para tener el control, y la estatización de las empresas Chaco, filial de British Petroleum; Transredes, subsidiaria de la también inglesa Ashmore, y Compañía Logística de Hidrocarburos Boliviana (CLHB), de inversionistas alemanes y peruanos.

El mandatario dijo que con esta nacionalización se está avanzando en lograr que los servicios básicos, sea teléfono, agua o electricidad, “no pueden ser un negocio privado”

Las medidas anunciadas por Morales permitirán a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tener 50 por ciento más una de las acciones de la subsidiaria de la española Repsol YPF. En los otros casos, el Estado asumirá el control total de las compañías nacionalizadas.

Internacional: 

Periódico: