Históricamente, uno de los estandartes de lucha de las y los estudiantes del IPN ha sido la salida de los grupos porriles, que son el cáncer que carcome a nuestra casa de estudios, pues estos grupos de choque, desde su aparición no han hecho sino amedrentar, intimidar, golpear incluso asesinar a estudiantes.

 

Es decir, los grupos porriles obstaculizan la vida académica y organizativa del Poli. Los porros son sin duda la herencia del priismo, funcionan como factor de contención y represión al sector estudiantil movilizado y organizado en las calles exigiendo educación pública gratuita y de calidad.

 

No nos parece casualidad que después de la jornada de lucha que tuvo el Politécnico por más de 70 días, en donde además del grito conjunto por la democratización del Instituto, encontráramos demandas importantes como la salida de la Policía Bancaria Industrial de las escuelas, y la salida de los grupos porriles que ha sido una demanda histórica y aún vigente.

 

Las autoridades y el gobierno federal se comprometieron a erradicar a estos grupos de choque y al día de hoy parece que se reactivan con mayor fuerza para acabar con el proceso organizativo de los estudiantes que sucede a la huelga estudiantil del Politécnico.

 

No podemos esperar nada de arriba para acabar con los grupos de choque a lo interno del IPN, debemos de reactivar la organización y la movilización estudiantil para acabar con las agresiones que recientemente algunos compañeros han sufrido.

 

El 1 de febrero, tras la provocación de una funcionaria, algunos padres de familia golpearon a estudiantes de vocacional 5 que tenían un paro activo a la exigencia de la salida de su director, el 4 y 6 de febrero ocurrieron dos conatos de agresiones e intimidación y golpes en la vocacional 11 por parte de grupos porriles, el 17 de febrero el decano de vocacional 4 Jorge Lara, amenazo a un estudiante que participó activamente en el movimiento.

 

El día de hoy 4 de marzo aproximadamente a las 7:30 pm, llegaron porros de vocacional 12 a petardear e intimidar afuera de la vocacional 6, cuatro compañeros están heridos.

 

Denunciamos los anteriores hechos, como una clara señal de amenaza a la organización estudiantil, creemos que mientras más fuerte sean sus amenazas, más fuerte será la organización estudiantil que replegará estos ataques a la vida académica y organizativa del IPN, les recordamos que el día en que decidimos dejar nuestros cuadernos y ver las problemáticas que hay en nuestra escuela, también dejamos a un lado el miedo.

 

Sabemos que la organización será la única forma de sacar a estos grupos de choque. Hacemos responsables al Director General de cualquier daño que pueda causar el porrismo a la comunidad politécnica, por negligencia o por encubrir a estos grupos de choque.

 

Hacemos un llamado a la organización estudiantil y avanzar por la construcción de la democratización del IPN.