El pasado domingo 9 de Junio se llevó a cabo la asamblea delegacional de Morena Venustiano Carranza con el objetivo de elegir al comité ejecutivo de la demarcación. Al evento asistieron alrededor de 350 militantes de base comprometidos con la construcción del partido y dispuestos a luchar en contra de las prácticas burocráticas y de acarreo que pretenden imponer las corrientes del PRD que ven en el Morena la oportunidad de obtener algún cargo de elección y de vivir a costa del movimiento, la asamblea se mostró dispuesta a combatir dichos métodos y a cerrar filas para defender el carácter popular del movimiento y su vinculación con la lucha social.

La elección del comité ejecutivo se desarrollo en un ambiente de amplia participación y debate, permitiendo a los asambleistas expresar sus opiniones y su perspectiva acerca del movimiento así como exponer abiertamente sus propuestas respecto a las tareas del partido. Pese a que algunas tribus del PRD intentaron imponer a sus candidatos por medio del acarreo de personas, la mayoría de  los cargos fueron obtenidos por militantes con trabajo de base y de reconocida trayectoria de lucha, como es el caso del compañero Sixto Bernal Hernández, quién resulto electo presidente del comité delegacional. Es importante señalar que la obtención de un cargo por medio de la elección en la asamblea representa un reconocimiento de la base al trabajo y a las propuestas de los candidatos, lo cual impone al compañero electo la obligación de responder a las demandas de la base. 

Los compañeros de la Izquierda Socialista que participamos en la asamblea señalamos que el Morena tiene que estrechar vínculos con los movimientos sociales, que debe manifestar su solidaridad, no solamente en el discurso, sino a través de la movilización permanente, con las luchas de la clase trabajadora, con los electricistas del SME que continúan en pie de lucha por la recuperación de su fuente de empleo, con los maestros organizados en torno a la CNTE que se están movilizando en contra de la reforma educativa, y, en general, con los movimientos populares. El desarrollo del partido no se limita a la adquisición del registro electoral ni mucho menos a la obtención de algún curul o algún puesto de elección popular, es la solidaridad en la acción con las luchas de la clase obrera y la toma de la vanguardia en contra de los ataques de la clase dominante – contra reformas estructurales, incremento a la canasta básica y productos de primera necesidad y decremento en la calidad de vida, entre otras – lo que realmente permitirá al Morena consolidarse como el partido que necesita el proletariado mexicano.

Una tarea muy importante de la base será luchar por que el partido se convierta en una herramienta de lucha para los obreros mexicanos y evitar que se repliquen en él, las practicas burocráticas, el arribismo y la división cupular que terminaron por transformar al PRD en un partido mas de la burguesía que ahora mismo trabaja en conjunto con el PRI, a través del Pacto por México, para impulsar las llamadas reformas estructurales. A través de la militancia activa, la participación democrática por medio de asambleas, el debate amplio y el trabajo de base en el día a día se podrá lograr que los miembros del partido tengamos control sobre nuestra dirección y eventualmente proponer su revocación en caso de traición al movimiento.

La misión no es fácil, el estado mexicano y la clase dominante lucharán por exprimir hasta el último centavo a la clase obrera nacional en beneficio de sus propios bolsillos, es por eso que el Morena debe jugar el papel de la vanguardia del movimiento sumándose a las batallas de la juventud y de los obreros.

El futuro es nuestro camaradas.

¡Adelante!