Las burocracias del PRI, PAN y PRD se disputan en las siguientes elecciones algo más que 14 Estados, ante todo la competencia tiene como fin ganar la mayor cantidad de elecciones locales para consolidar sus estructuras rumbo al periodo de elecciones intermedias de 2015. El pacto no ha sido completamente de fotos y eventos de presentación de las contrarreformas, ahora que vienen las disputas el PAN y en menor medida el PRD, buscan frenar a los operadores políticos del PRI que utilizan los recursos del aparato federal.

Es necesario aclarar que acontecimientos como las grabaciones de operadores políticos del PRI, ahora como delegados de la Secretaría de Desarrollo Social, que ejecutan la Cruzada contra el Hambre mostradas por el PAN¹, no son muestras de “buenas intenciones” de Acción Nacional², o lo reportado por el PRD en GAM sobre el marcaje a personas para poder acceder a los beneficios de la Cruzad³, son intentos de las burocracias partidistas de descalificar a sus competidores para lograr disminuir sus posibilidades de arrebatarles posiciones.

A pesar de los diferentes escándalos en diversas entidades del país y la posible “ruptura” anunciada por el PAN, los tres partidos al servicio de la burguesía firmaron un adéndum (ratificación de acuerdo original del Pacto) para mostrar “unidad”, pero sobre todo, para manifestar que no se detendrán en llevar adelante la agenda de los capitalistas nacionales y el imperialismo que les exigen no frenar el proceso de aprobación de las contrarreformas y culminarlo por completo.⁴

La “combatividad” del PAN

Inicialmente resultó sorpresiva la ofensiva del PAN en denunciar a los operadores políticos del PRI en Veracruz, sin embargo, más allá de las conferencias de prensa y lo mediático de sus denuncias, el PAN solo busca presionar al PRI para obtener mayores espacios en los municipios de ese Estado y eventualmente hacerse de la gubernatura ante la nefasta administración del Gobernador Duarte.

En términos de la dirigencia nacional, ésta solo fue la que llevó a cabo la operación de presión para el PRI, pero fue también el mismo Gustavo Madero, que inicialmente inició la arremetida, quien nuevamente acudió a la firma del adéndum junto con su nefasta contra parte perredista Jesús Zambrano.

El PAN no puede ser una oposición verdadera (aunque lo deseara) al PRI simplemente porque busca los mismos fines que éste en términos de las contra reformas estructurales, sin embargo, también busca conservar y ganar más posiciones. Otros casos, como la guerra sucia en Baja California, solo muestran que el PAN no ha aprendido a aplicar otra estrategia que no sea la descalificación y el uso de los medios para jugar una guerra psicológica contra sus adversarios, pero hay intereses coincidentes entre ese partido y el ocupantedel ejecutivo federal, ellos no dependen de políticos locales, diputados ni senadores, mucho menos de su dirigencia nacional, es una agenda de clase que no pueden negarse a impulsar ya que de otra manera podrían erosionar su propia base de apoyo entre sectores burgueses nacionales e internacionales. A lo sumo el PAN tratará de conseguir bastiones que alguna vez gobernó o donde tenga posibilidad de desplazar al PRI (en alianza con el PRD).

La esquizofrenia Perredista

Fue Jesús Ortega, afamado oportunista líder de la corriente Nueva Izquierda, quien afirmó que una vez que AMLO había abandonado al PRD la “esquizofrenia” que supuestamente había prevalecido en el partido habría llegado a su fin.⁵ Tal premonición resultó ser errónea, más que disminuir, la esquizofrenia política del PRD se ha agravado.

El PRD no ha salido de su dinámica de lucha entre fracciones, ahora ya no se encuentran en la pelea por el control del Partido, sino en cuál de ellas puede venderse de mejor manera (obtener más beneficios) al PRI y a Enrique Peña Nieto⁶. Sin embargo, la contradicción se da entre las cúpulas de las corrientes y las bases que no se encuentran conformes con el actuar de la dirigencia nacional.

Así mismo, mientras que Nueva Izquierda aplaude la Cruzada contra el Hambre en el D.F., la administración que encabeza Miguel Ángel Mancera busca frenar la intrusión de operadores políticos del PRI en el D.F., nuevamente, porque su intención es evitar que puedan quitarles votos en el futuro y minar la base clientelar del PRD en el D.F.⁷ Por otra parte, ahora la corriente de Bejarano-Padierna poco a poco ha perdido el control de posiciones que le permitían presionar al jefe de Gobierno, prácticamente Mancera tiene maniatada a IDN en el D.F.

Finalmente, la principal muestra de esquizofrenia del PRD ha sido su acrítico apoyo a la contrarreforma educativa; proceso que ha tenido su punto más álgido en el Estado de Guerrero, donde los profesores de la CETEG, ante el hartazgo y traiciones del PRD de Guerrero, han radicalizado sus protestas e incendiado en dos ocasiones las instalaciones de ese partido, lo que muestra por una parte que el PRD de la entidad en realidad es un PRI “amarillo” y que es imposible que ese partido pueda significar para los trabajadores, por lo menos a nivel del Estado de Guerrero, una opción para transformar sus condiciones de vida.

¿MORENA la única oposición?

La dirigencia nacional del Movimiento Regeneración Nacional ha utilizado como estrategia contra el Pacto promover la idea de que MORENA es la única oposición a los partidos del que conformar a la “troika” mexicana⁸. Lo anterior bajo la idea de que ello puede generar simpatías hacia el movimiento y de esa manera ganar una mayor cantidad de adherentes bajo el contexto actual de afiliación y conformación de comités hacia la finalidad de que MORENA sea reconocido como un partido político por el sistema legal vigente.

Lo anterior es una clara equivocación que no toma en consideración los siguientes puntos:

1.- Existen movimientos más allá de MORENA que están buscando combatir al régimen priísta junto con sus aliados. El autoproclamarse como “la única oposición” no ayuda en nada a la conformación de alianzas con esos grupos que de manera sana buscan objetivos similares a los de MORENA, por el contrario, la propaganda mencionada coadyuva en la invisibilización de dichos movimientos ante la base de MORENA y fomenta las actitudes sectarias de diversos integrantes de organizaciones que están realizando esfuerzos por tratar de oponerse al aparato burgués. Igualmente, que la dirigencia de MORENA solo realice pronunciamientos pero no convoque a movilizar ni a solidarizarse en forma con los movimientos en lucha repercute en una parálisis a nivel de las bases del movimiento, que lejos de observar los acontecimientos con pasividad mantienen una actitud crítica frente a la dirigencia en sus distintos niveles.

2.- Considerar a la afiliación y la defensa del petróleo como únicos fines inmediatos del movimiento solo favorece a las tendencias burocráticas al interior de MORENA. Por otra parte, ello no está significando una adhesión mayor de compañeras y compañeros al nuevo partido, si no existen acciones de lucha de MORENA ¿por qué habría de incrementarse la afiliación cuando existe un descredito mayoritario hacia los partidos políticos? (sin importar si estos tienen registro o no)La experiencia comparada nos muestra que, en el contexto de crisis general del capitalismo, los partidos de izquierda que, o bien hacen juego a la burguesía como el PSOE en España, o no participan en la lucha social, no están en posibilidades de fortalecerse y crecer (realmente no podría ser de otra manera, el trabajador que no está politizado observa a los partidos más como una carga que como una herramienta para luchar por sus intereses). Pero también otros partidos muestran formas de actuación que les han permitido incrementar sus adeptos y ser cada vez más una opción de lucha para los trabajadores, entre ellos, Syriza en Grecia, Izquierda Unida en España, el Frente de Izquierdas de Francia bajo el liderazgo de Jean-LucMélenchon o el PSUV de Venezuela que mediante las movilizaciones pudo mantener a raya el intento de golpe de Estado de la derecha venezolana.

Unidad en la lucha contra el Pacto de la burguesía

¿Es posible frenar a un aparato que actúa de forma conjunta de manera dispersa, y además si en algunas ocasiones, la oposición se obstaculiza mutuamente? La respuesta parece sencilla, sin embargo, parecería que aquellos que están empecinados en luchar por su cuenta dirían que sí es posible frenar a la burguesía actuando de esa forma. La unidad de la lucha social no se decreta, debe construirse, por ello es necesario observar los ejemplos que han derribado el sectarismo que en ocasiones impera en la Izquierda.

El caso de la CETEG guerrerense y las policías comunitarias de ese Estado han abierto una discusión en torno a posibles estrategias para combatir a la derecha. Los militantes de diferentes organizaciones y movimientos sociales no pueden pasar por alto dichos ejemplos, además, en particular los militantes de MORENA, están llamados a rebasar la dinámica de afiliación imperante, los comités de base son los instrumentos principales desde donde se pueden impulsar las acciones, no solo para solidarizarnos con otros movimiento sociales, sino también para participar codo a codo en sus luchas (siempre de forma crítica, lo que implica que no necesariamente deben apoyarse a cualquiera si sus fines son ilegítimos o si actúan de forma sectaria).

Enfrentar a la derecha no es una cuestión de valentía y sacrificio sin una táctica correcta, es necesario romper con las posturas sectarias que no ayudan a fortalecer a la oposición contra el régimen burgués. Nuestra tarea se encuentra en la construcción de un Frente de Oposición que no se limite al espectro parlamentario (donde en definitiva es casi inexistente dicha tendencia), sino también en cada barrio, en cada calle. Solo la unidad popular puede plantear una afrenta seria a los embates de la derecha (y sus aliados de “izquierda”) que no piensan detener su embestida.