¿Qué sigue para Morena? ¿Partido o movimiento?

Escrito por: 

Claudia Fabiola Jay , Morena-je Naucalpan

Es necesario obtener las conclusiones lógicas de este proceso, que ha iniciado desde la formación de Morena, hasta la imposición de Peña Nieto en la Presidencia, ya que la burguesía se ha jugado todo en la reciente campaña electoral en defensa de sus intereses, en un futuro no muy lejano empezaremos a ver los ataques del gobierno de EPN hacia los trabajadores y la juventud, la única alternativa que tenemos es la organización y la lucha bajo un programa claro que represente nuestros intereses de clase y una dirección decidida que este dispuesta a luchar contra la burguesía.

Orígenes

En 2005 inició una etapa en la lucha de nuestro país, en ese año vimos miles de personas en las calles para defender la candidatura de AMLO que se veía amenazada por parte de la oligarquía al tratar de quitarle el fuero, usando un argumento absurdo, pero con el cual querían impedir que la izquierda fuera encabezada en las urnas por un personaje como él, susceptible a las presiones del movimiento popular y de la clase trabajadora, que pudiera despertar la esperanza de mejorar las condiciones de la población . La candidatura de AMLO para la izquierda fue producto de las movilizaciones en las calles.

La campaña de AMLO en 2006 fue tomada por millones de personas como una alternativa, ante el fracaso de las políticas aplicadas en nuestro país los últimos años, no había lugar en donde AMLO se presentara que no fuera abarrotado, especialmente las plazas públicas, todo esto provocó un ambiente favorable  para ganar las elecciones y que la izquierda llegara al gobierno, la ventaja de AMLO sobre Felipe Calderón era muy amplia y el ambiente entre las  masas era de triunfo.

En la década pasada se dieron una serie de procesos en América Latina que dejaban ver cual seria el camino para México, procesos como en Venezuela que iniciaron cuando la Izquierda llegó al gobierno y estos se profundizaron en años posteriores planteando nacionalizaciones y la lucha abierta contra el imperialismo, las trasnacionales y la burguesía nacional. En los años posteriores vimos como un número importante de países optó por gobiernos de izquierda, en los cuales las contradicciones en la sociedad se profundizaron, los trabajadores, las masas, despertaron de su largo letargo y se derrotó a los partidos serviles a los gobiernos de los Estados Unidos, poniendo a la orden del día la lucha contra el imperialismo y la lucha por acabar con el poder de la burguesía y la oligarquía en cada país.

Todo esto lo analizó la burguesía en México, el hecho de tener un país en donde se dieran procesos como estos tan cerca de Estados Unidos, con millones de trabajadores migrantes en ese país, implicó la necesaria imposición de Felipe Calderón en la presidencia por la burguesía nacional y el imperialismo norteamericano para seguir manteniendo sus privilegios e impulsar las llamadas reformas estructurales en beneficio de los empresarios y banqueros, en contra de los trabajadores y pobres de México.

Tras el fraude electoral de 2006, el movimiento de millones de personas estaban dispuestas a todo, en una encuesta que ha mencionado López Obrador se decía  que 10 millones de personas estaban dispuestas a tomar las armas para impedir que FeCal se impusiera en la presidencia. En general en 2006 vivimos un proceso de ruptura en la conciencia de millones de personas, las masas salieron a las calles, en la memoria de un sector de la población quedo marcado fuertemente la lucha contra el fraude electoral, identificando la lucha con AMLO y sus llamados organizativos, como fue las asambleas de la Convención Nacional Democrática y el Gobierno Legítimo, a la par vivimos procesos como la insurrección revolucionaria en Oaxaca y una fuerte movilización sindical encabezada por los mineros.

Una vez que Calderón fue impuesto millones de personas no estuvieron dispuestas a regresara a sus casas después del proceso electoral y ante la convocatoria de AMLO se formó la Convención Nacional Democrática por medio de la cual AMLO fue declarado Presidente Legítimo ante miles de personas en el Zócalo, con el objetivo de luchar en contra de las políticas que tratara de implementar el gobierno de Calderón. El movimiento que ha encabezado AMLO ha pasado por diferentes fases: CND, Movimiento en Defensa del Petróleo y la Soberanía Popular, las Brigadas en Defensa de Petróleo y ahora el Morena.

Uno de los objetivos de estos procesos organizativos, después de 2006 era poder organizar un movimiento que hiciera que AMLO llegara a la presidencia y de esta forma evitar un nuevo fraude electoral. Por lo que el año pasado se hizo un llamado a formar Morena, una asociación civil que fuera un impulso para la campaña electoral de la izquierda apoyado en los tres partidos de izquierda, pero cuya estructura no dependiera de las cúpulas del PRD, PT o Movimiento Ciudadano.

Este llamado hizo que se formarán comités en todos los distritos y secciones electorales y los que ya existían se fortalecieran. Un factor importante fue la formación de Morena jóvenes y estudiantes, que es el ala juvenil de Morena que tuvo un eco en miles de jóvenes a nivel nacional, reflejando el ambiente subterráneo de lucha que se vivía dentro de la juventud, lo cual vino a comprobarse posteriormente con el movimiento #YoSoy132.

Campaña Electoral y la lucha contra la imposición

El viernes 11 de mayo Enrique Peña Nieto visitó la Universidad Iberoamericana como parte de su campaña, de hecho fue la única Universidad que visitó pero se encontró con la protesta generalizada de los estudiantes que repudiaron su visita, prácticamente tuvo que salir corriendo de esta Universidad después de haberse quedado escondido, por unos momentos, en el baño.

Después de esta protesta el dirigente nacional del PRI Joaquín Codwell declaró que quienes estuvieron en la protesta contra EPN fue una minoría, que había infiltrados en la protesta y pidió que se investigara a los responsables del rechazo al candidato de su partido, de hecho el mismo EPN dijo que no todas las protestas de los estudiantes eran genuinas. Esto provocó un repudio total, no solo de los estudiantes de esta Universidad sino a nivel nacional, que posteriormente sería el movimiento #YoSoy132.

Este hecho fue un parteaguas en la campaña electoral, ya que a partir de este momento la campaña de AMLO fue en ascenso, el movimiento juvenil se unificó contra la candidatura de EPN, no había lugar donde este se presentara que provocara que la juventud saliera a las calles. Lo que le dio nuevamente un impulso a la campaña de AMLO fue el movimiento, pero esta vez fue  la juventud que tenía años que no se expresaba de esta forma en nuestro país.

A partir de las protestas juveniles la campaña de AMLO comenzó a subir rápidamente, el mensaje enviado a partir del planteamiento de la llamada República Amorosa no consiguió el efecto deseado, causó confusión entre los sectores populares, los cuales son la base social natural de la izquierda, no conectó con la clase media (los estudiantes de las universidades privadas estaban en las calles movilizándose contra el PRI), la moderación no fue el secreto del éxito de la campaña de AMLO, fue la movilización en las calles lo que saco de su letargo la campaña electoral.

El PRI tuvo que sacar a las calles a sus porros e intentó reprimir en algunos lugares para tratar de frenar las protestas de la juventud, esto sucedió en estados como Veracruz donde gobierna este partido, pero eso evitó que la juventud se organizara contra la visita de este candidato.

El día de la elección la compra del voto por parte del PRI fue descarada, se acarreó a millones de personas ese día. Posteriormente salió a relucir la compra del voto con las tarjetas Monex de Soriana, se habla de que fueron más de 66 millones de pesos, dinero que el partido justificó ante el IFE y la PGR de la siguiente manera:

“La estructura del PRI fue reforzada con la contratación de personal en distintas áreas de trabajo, para cumplir con metas y objetivos relacionados con tareas ordinarias del partido, lo que obligó a recurrir a un sistema práctico de contratación de personal, acompañado de un método eficiente y eficaz de pago, apto para responder a la velocidad de los requerimientos del partido”.

La respuesta de AMLO ante este fraude electoral fue solamente de orientarse a dar la lucha jurídica haciendo denuncias que la gente hizo llegar, de como fue la compra del voto, el problema es que durante los dos fraudes electorales que ha habido (el de 1988 y el de 2006) hemos visto como las instituciones como el IFE y el TEPJF están al servicio de la oligarquía y aunque pregonan defender la democracia en nuestro país, su verdadero papel ha sido el de proteger los intereses de la burguesía nacional y extranjera.

Los primeros días y semanas posteriores al fraude eran clave para poder detener la imposición de EPN, una de las lecciones que nos dejo la lucha del fraude de 2006, fue que ni el plantón de Reforma, ni movilizaciones de mas de 3 millones de personas detuvieron la imposición de FECAL, la táctica utilizada por parte de la oligarquía en nuestro país fue el de soportar algunas semanas de movilizaciones en las principales ciudades y esperar que la misma dinámica del movimiento lo llevara a disminuir las protestas. El día 30 de agosto el TEPJF rechazó anular las elecciones a pesar de todas las denuncias que se hicieron, el presidente del tribunal declaró que todos los agravios expuestos por el Movimiento Progresista fueron infundados.

Los fraudes electorales que han ocurrido en la historia reciente del país le han costado mucho a los trabajadores y a los jóvenes, con el sexenio de Salinas el movimiento fue golpeado, se dio una privatización masiva de empresas estatales, incluida la banca, millones de personas pasaron a las filas de la pobreza extrema. De igual forma con el gobierno de Calderón se han perdido millones de empleos, las condiciones de vida de la población han caído de forma catastrófica y por supuesto la ola de violencia que ha costado al país más de 70 mil personas asesinadas por la llamada “guerra contra el narcotráfico”.

Si esta imposición se concreta no será por la falta ímpetu en la lucha del pueblo y la juventud, será por la falta de orientación, convocatoria y dirección en el movimiento y el limitar la lucha solamente en el aspecto legal.

Durante 8 años el movimiento ha pasado por diversas fases, desde el desafuero hasta la lucha contra lo que representa Peña Nieto, el movimiento ha generado una diferenciación dentro de la izquierda, entre aquellos que aspiran a pactar con el régimen y aquellos que deseamos acabar con el poder político y económico de la oligarquía, entre aquellos representantes de la izquierda más moderada y conciliadora y las masas populares que han seguido a AMLO.  

Para ser sinceros, muchos esperábamos más en la asamblea del 9 de Septiembre, un plan de lucha más radical para evitar la imposición de Peña Nieto, el grito de ¡Revolución! se hizo presente en la plancha del Zócalo, refleja el sentimiento de miles de personas y de lo que están dispuestas a hacer por evitar seis años más de violencia, pobreza y explotación, todo el potencial de Morena será canalizado para decidir su futuro el cual se debate entre permanecer como Asociación Civil o convertirse en un Partido Político, hacia esa dirección se orientaran miles de personas con las esperanzas de construir una organización política que haga realidad sus aspiraciones de acabar con el régimen actual, que proviene del actual sistema político y económico, basado en la lógica de la ganancia empresarial.

Morena ¿partido o movimiento?

El debate está abierto, AMLO y miles abandonaremos a los partidos del Movimiento Progresista para construir algo nuevo, en realidad la diferenciación de la izquierda era un hecho desde años atrás, fue madurando y a partir de 2008 salieron a relucir las fuertes diferencias a lo interno del PRD y la izquierda en su conjunto, con métodos, ideas y planteamientos que no representan al pueblo, ni a la clase trabajadora. Los personajes de la Nueva Izquierda y Moderna, aspiran a convivir con el régimen y el sistema, sostenerlo desde el lado izquierdo, se asumen como hombres de Estado y de instituciones, las mismas que mantienen y promueven el poder de la oligarquía, en realidad los métodos burocráticos y corruptos promovidos por ese sector de la izquierda, deviene de una concepción de aceptar, convivir y coexistir con el régimen y el sistema económico actual, si aceptas al sistema como algo viable, aceptas sus métodos y sus reglas de juego, miles hemos optado por un camino diferente.

El debate sobre movimiento o  partido no debe de representar una contradicción. Un partido no lo debemos concebir sólo como aquella agrupación de individuos que participa en el proceso electoral, esa es la visión que nos ha formado un sector de la izquierda, participar políticamente sólo en las elecciones, vincularnos a los movimientos sociales, sólo en la medida en que el movimiento sea rentable electoralmente, fuera de este proceso el partido se mantenía poco más que activo y todo se reducía al juego de las instituciones y al juego parlamentario.

El que Morena se convierta en partido no significa que abandonaremos el proceso de la lucha popular, social, o sectorial; al contrario debemos ser promotores activos de las luchas de los jóvenes, estudiantes, obreros, campesinos y los derechos de las mujeres. Ahí donde nos encontremos, en las colonias, centros de trabajo o estudio debemos ser los principales promotores de los derechos de los estudiantes, los jóvenes, los obreros, campesinos y los derechos de la mujer. Vincularnos a las luchas que surjan y observarlas no desde el ojo electoral, sino desde el punto de vista de un luchador social y revolucionario que aspira a acabar con el poder de la oligarquía, Morena no sólo debe de enfocar sus fuerzas a los procesos electorales, sino debemos priorizar la organización y la movilización popular. Los mejores elementos de esos movimientos amplios debemos aspirar a que  integren los organismos de base (comités) del nuevo partido, los cuales debemos de formar mediante una lucha consciente de formación y consolidación política. La relación partido – movimiento no es contradictoria, sino complementaria.

El partido impulsa o se vincula la lucha estudiantil, popular,  obrera y campesina, ayuda a generar un amplio movimiento y los mejores elementos los invitamos de manera fraterna a integrarse a Morena. Pero el partido también deberá de promover la lucha política contra los oligarcas y su gobierno, debe de llamar a movilizaciones amplias contra las futuras reformas que atentan contra los intereses del pueblo y los trabajadores, y en época electoral se deberá participar bajo está visión, el fortalecimiento de la organización del pueblo y los trabajadores.

Para evitar la reproducción de los mismos esquemas que el PRD, deberíamos de plantear una serie de medidas hacia los organismos de base y de dirección, debemos impulsar una campaña permanente de formación política de los militantes, en los comités de base deberá de existir una lucha cotidiana por discutir políticamente en cada reunión, la formación de los cuadros es una herramienta necesaria para el control de la dirección la cual debería de rendir cotidianamente informes de sus actividades y esos cargos deberán de ser revocables en todo momento cuando la mayoría de los militantes de el municipio o estado lo solicite. Los congresos y asambleas deberán de ser democráticos y participativos, deben estar representados y participar activamente los comités seccionales del nuevo partido.

Sobre los cargos de elección popular debemos promover que nuestros compañeros que lleguen a estos, deberán de renunciar a los privilegios que otorgan dichos cargos y poner esos recursos para la construcción del partido, un salario ostentoso en manos de los compañeros es la forma más sencilla de comprar indirectamente, por parte de la oligarquía, a nuestros representantes, desde nuestro punto de vista los representantes populares deberán de ganar, no más que un trabajador con nivel calificado en nuestro país, el resto de su salario deberá ser entregado integro al partido, si pedimos austeridad, debemos comenzar con nuestros propios compañeros.

Un partido puede tener muchos recursos, locales, dinero, pero si no tiene un programa claro está condenado al fracaso, un paso adelante fue el nuevo proyecto alternativo de nación, elaborado por los intelectuales más reconocidos de nuestro país, nadie puede estar en contra de la luchar por elevar el nivel de vida de la población, la lucha contra la corrupción y un gobierno honesto y justo, pero debemos poner a consideración como completar el programa ante un sistema capitalista en crisis a nivel mundial, que condena a miles a vivir en la miseria, mientras los banqueros y empresarios mantienen sus ganancias. La desigualdad social, la corrupción y los gobiernos serviles, surgen a partir de la necesidad de mantener el actual sistema de explotación, basado en la propiedad privada de los medios de producción, las grandes empresas y bancos en manos de un puñado de personas, es el principal obstáculo para avanzar en una sociedad, proponemos a consideración de los militantes de Morena el incluir en el programa la nacionalización de las grandes empresas y bancos y ponerlos bajo el control de la sociedad y los trabajadores, no queremos nacionalizar la pequeña empresa, el pequeño negocio o taller, sino las grandes empresas que en el caso de México se adquirieron durante los sexenios de Salinas, Zedillo, Fox y Calderón mediante el soborno, el amiguismo y la corrupción.

Sólo diremos que Morena representa una gran oportunidad para refundar la izquierda, representa una gran oportunidad para construir un partido que represente los intereses del pueblo, de los pobres y oprimidos en nuestro país, que aglutinen a los trabajadores, jóvenes e intelectuales conscientes que desean acabar con el poder de la oligarquía basado en su control sobre las palancas fundamentales de la economía, no solamente saludamos esta iniciativa, sino que lo asumimos como nuestra.

Fecha: 

Septiembre de 2012

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