Ecuador se encuentra ante el peligro de un Golpe de Estado, en el momento de escribir estas líneas el presidente Correa se encuentra hospitalizado y prácticamente secuestrado, las masas se están congregando a las afueras pero los militares obstaculizan la protesta del pueblo e impiden que representantes del Estado lo puedan ver. Las oposición de los policías y militares a una ley de gobierno que les quita beneficios ha sido el pretexto para impulsar el Golpe de Estado. Los Policías tomaron el cuartel militar, el regimiento 1, poco tiempo después militares han tomado el aeropuerto de Quito y más tarde los policías se tomaron la Asamblea Nacional. No nos sorprenden similitudes con golpes perpetuados recientemente en América Latina, dentro de ellas está el que han intervenido los medios de comunicación estatales para tratar que los trabajadores a nivel nacional e internacional no nos enteremos de lo que ocurre. Eso no detendrá la fuerte resistencia de los trabajadores.

Correa dijo un discurso frente a los policías diciendo que no caería en chantajes y mostrando su disposición a morir por la causa de transformar a Ecuador. La situación es crítica, Correa tuvo que ir al hospital debido a problemas con su rodilla al haber sido operado recientemente y a que fue agredido con gases lacrimógenos. El presidente Chávez confirmó en Telesur que Correa está secuestrado:
"He hablado con él, unas cuatro o cinco ocasiones desde que comenzó el problema (...) me acababa de ratificar que lo tienen secuestrado. Hace un minuto me lo repitió (Rafael Correa) estoy aquí dispuesto a morir, yo no voy a ceder". (Telesur.net)
Un sector de las fuerzas Armadas ha declarado su lealtad al presidente, como en Venezuela en el 2002 el elemento clave será la determinación y la lucha de los trabajadores lo que permitirá que sean aplastados los elementos golpistas y se pueda revertir la intentona reaccionaria. Marx decía que la revolución necesita del látigo de la contrarrevolución para avanzar. Los marxistas de la Tendencia Marxista Militante, sección mexicana de la Corriente Marxista Internacional, manifestamos nuestra solidaridad con la clase obrera y los campesinos de Ecuador, en sus manos está detener este golpe de Estado y aplastar a la reacción.
En 2002 los trabajadores de Venezuela mostraron el camino a seguir con la insurrección que revirtió el golpe. En Honduras el golpe se consumó y hubo grandes protestas revolucionarias, pero faltó determinación en los momentos clave y avanzar a acciones como una huelga general, aun así las masas crearon el FNRP y siguen manifestándose contra el gobierno golpista de Lobo, continuador de Micheletti. Las masas no han sido aplastadas.
A diferencia de lo que pasó en Honduras, este golpe aun no se ha consumado. Los ojos de los trabajadores y el mundo están puestos en Ecuador, mostraremos nuestra solidaridad internacionalista pero la responsabilidad de revertir este golpe recae sobre los hombros del proletariado y demás masas oprimidas de Ecuador. Fueron estos trabajadores los que hicieron la rebelión de los forajidos contra Lucio Gutiérrez y lo echaron del gobierno cuando les traicionó, hay grandes tradiciones revolucionarias en el pueblo ecuatoriano. Hay que salir a luchar que de consumarse el golpe la burguesía intentará revertir todas las conquistas implementadas durante el gobierno de Correa y de ser necesario aplastar en sangre la lucha.