[Editorial 194] Lecciones del proceso electoral del 4 de julio

Escrito por: 

Salvador Guerrero

Las elecciones del 4 de julio han sido muy llamativas. No se puede decir que el PRI se ha levantado o que la alianza del PAN-PRD haya sido correcta por haber ganado tres gubernaturas. Debemos hacer un análisis detallado sobre los resultados y contextualizarlos en la coyuntura actual.

¿Derrota o triunfo del PRD?
Salvo en los estados de Oaxaca, Sinaloa y Puebla, el PAN y PRD han sufrido una derrota muy importante.
El PRD perdió la gubernatura de Zacatecas y además redujo la cantidad de votos que obtuvo con respecto a 2007 en las elecciones para gobernador. Por ejemplo en Aguascalientes perdió 5,504 votos, en Tlaxcala 96,981. Además de pasar de 5 diputaciones a 1 en el mismo estado. Estos resultados reflejan, el hartazgo por parte de los militantes del partido a su dirección. Un sector importante veía una opción en el PRD, pero ahora no han votado por él.
Ahora, el caso de Puebla y Oaxaca es bastante peculiar. Los gobiernos de Mario Marín en Puebla y Ulises Ruíz en Oaxaca han sido de lo más represor y corrupto que se haya conocido en el último periodo. Ambos gobernadores son odiados por los trabajadores y la juventud. Ulises Ruíz reprimió la lucha del pueblo oaxaqueño y Mario Marín está ligado con violadores y pederastas. Por ello el rechazo al PRI en las urnas en estas elecciones. Un dato importante es que a pesar de que la alianza PAN-PRD haya ganado en Puebla, el PT incrementó sus votos de manera impresionante. En las elecciones pasadas para gobernador el PT obtuvo cerca de 28 mil votos y en estas elecciones votaron poco menos de 117 mil personas. Esto es un aumento de más del 400%. Este dato hay que tenerlo mucho en cuenta, ya que refleja, como hemos comentado, el descontento por la dirección del PRD y una búsqueda de alternativas de por parte de un sector de izquierda.
No cabe duda que el triunfo de la coalición en estos estados ha sido  en realidad  producto de una reacción de los trabajadores en contra de gobiernos escandalosamente corruptos. En estas circunstancias  unas candidaturas de la izquierda unificada con un programa claro y una intensa movilización hubieran significado una avance histórico, en  lugar de ello el PRD ha preferido  entrar en coalición dándole un tanque de oxigeno al PAN, cuyo desprestigió por el gobierno de Calderón los hubiera llevado a una derrota total.
La división del trabajo no podía ser mejor para la derecha; el PAN pone los candidatos, la izquierda, particularmente el PRD pone los votos. Ello es particularmente destacable en Oaxaca, donde el PAN prácticamente no existe, no obstante por la alianza gobernará como si en realidad tuviera alguna fuerza en ese estado.
En el caso de Sinaloa en realidad se trataba de dos candidaturas del propio PRI, Malova era el candidato natural del priísmo sinaloense, no obstante por sus malas relaciones con el centro nacional fue hecho a un lado no obstante aún hoy en día sigue siendo senador del PRI con licencia y con esa calidad tomara posesión como gobernador.

La política de los candidatos PAN-PRD
Al conocer su triunfo Gabino Cué, candidato del PAN-PRD al gobierno de Oaxaca, expresó las gracias al López Obrador y Felipe Calderón. Agradeció el apoyo de Obrador en la campaña y además dijo que Calderón era un “amigo del estado”. Por otro lado, Mario López Valdez, ganador de la gubernatura en Sinaloa, ha sido priísta por años.
¿Podemos esperar un gobierno a favor de los trabajadores? Nosotros creemos que no. Aunque el PRD forme parte de estos gobiernos, no es el PRD legítimo, de izquierda quien gobernará. Ni siquiera podemos pensar en que habrá algunas disputas internas dentro del gobierno porque lo formen partidos con intereses opuestos. Todo lo contrario. La dirección del partido ha sido tomada por la derecha y la política que quieren manejar no es a favor de los trabajadores y pobres del país. Esos gobiernos irán encaminados en apoyar la política de Calderón.

Zacatecas, una gran derrota

Hacia 12 años que el PRD gobernaba Zacatecas, no obstante en las elecciones del 4 de julio la votación del PRI fue superior a la del PRD casi en una proporción de dos a uno( 45% contra 25%), ¿cómo podemos explicarnos esta debacle? Una de las razones fue la división del voto de la izquierda la cual se expreso en la candidatura separada del PT, la cual obtuvo una votación superior al 15%. No obstante el elemento clave de esta debacle ha sido la desastrosa administración  de Amalia García la cual generó un ambiente de apatía por el proceso que se tradujo en un abstencionismo superior al 50%.
La  dirección del PRD encabezada por Jesús Ortega señalaba que uno de los objetivos eran restar margen de maniobra al priísmo de cara a las elecciones del 2012,  si revisamos el caso de Zacatecas ahora tendremos un nuevo espacio desde el cual el priísmo podrá maniobrar, el cual es calve dado que en estado colinda con prácticamente todo el centro y el norte de la república. En el caso de los demás estados donde las coaliciones triunfaron la situación no es muy alagueña; en Puebla será el panismo, el mismo que orquestó en fraude contra Andres Manuel López Obrador  pero que ahora tendrá las riendas del gobierno local para planificar cualquier maniobra, en el caso de Oaxaca tenemos a Gabino Cue, del cual no es desconocido el apoyo  de exgobernadores priístas como José Murat y Diodoro Carrasco, cuyos grupos políticos se integraran al gobierno de Cue, dejando espacios para las maniobras que supuestamente la táctica aliancista pretendía hacer a un lado.

Marcelo Ebrard Dime con quién andas…
Otro de los aspectos más importantes del reciente proceso ha sido el destape de Marcelo Ebrard como precandidato a la presidencia por parte del PRD, su participación en la mayoría de los mítines de la coalición PAN-PRD, y su toma de posición a favor de las alianzas representa toda una declaración de rompimiento respecto a Andrés Manuel López Obrador. Marcelo es ya el virtual candidato de la derecha del PRD y de ahora en adelante toda la política de la derecha estará encaminada a forzar a AMLO a declinar a favor  del delfín de Manuel Camacho Solís. Esta situación debe obligar a los sectores de izquierda a deslindarse abiertamente de las pretensiones de Marcelo y lanzar una batalla interna por recuperar al partido de manos de  la derecha chuchista.

La dirección del PRD apuntala un bipartidismo reaccionario
Por alguna razón desconocida la derecha del PRD  encuentra diferencias entre el PRI y el PAN y considera a las administraciones panistas menos nefastas que las del PRI, llegando  en los hechos a apuntalar al régimen de Calderón precisamente en el momento en el que es menos popular.
Parece una locura pero tiene su lógica: la actual dirección del PRD ya no desea  cambiar sustancialmente nada del actual régimen sino acomodarse en el, para ello lo importante es mostrarse como aliados útiles del gobierno y así obtener por la vía de la negociación posiciones  en la administración pública. En ese proceso incluso el PRD es prescindible.
Ya se perfila una posible alianza con el PAN en las elecciones del Estado de México, lo que simplemente significará entregar al PAN los millones de votos perredistas del oriente del Valle de México. El resultado para el PRD será su desdibujamiento como alternativa distinta al PAN y al PRI reduciéndolo a un papel permanentemente minoritario. Con una cantidad de votos, 10 o 15% tan sólo suficiente para actuar como bisagra, es decir otorgarle mayoría al PAN u ocasionalmente al PRI.

El papel del PT
Sin duda el PT  ha mostrado un incremento de votos muy consistente, no obstante  tampoco se ha diferenciado mucho de la dirección del PRD en cuanto a la política de alianzas. En uno de los estados con más presencia, Durango, su candidato declinó a unos días de las elecciones aún a pesar de que tendría una votación superior al 10%, bastante aceptable como para irse perfilando como una opción de izquierda.
El PT  ha continuado su campaña en favor de la candidatura de AMLO  pero no se puede descartar un cambio de opinión por parte de la dirección de este partido, por ello es fundamental una movilización de las bases petistas a favor de una candidatura de izquierda encabezada por AMLO.

Los próximos retos
Una de las principales aspiraciones de la burguesía para las próximas elecciones es que todas las candidaturas representen el mismo compromiso con la defensa del actual régimen. Si bien los marxistas consideramos que los procesos electorales son solamente un elemento de la lucha de clases y de hecho no el más importante, también creemos que  es necesario dar la batalla en ese frente proponiendo candidaturas que enfrenten los intereses de la burguesía y que permitan a los trabajadores una organización más independiente y combativa en país de sus propios intereses. En estos momentos estas alternativas están centradas en torno a AMLO y a los grupos y corrientes que desde el PRD, PT y distintas organizaciones impulsaran su candidatura para el proceso electoral del 2012.
Por supuesto esta lucha no será la única, el movimiento sindical, el campesino, el estudiantil tienen que actuar de forma unificada  en función de sus demandas concretas, pero está claro que mientras el régimen central este dominado por un grupo absolutamente afín a los intereses de la burguesía, las luchas sociales enfrentaran las mismas dificultades que actualmente tienen los electricistas y los mineros, por citar sólo a los más emblemáticos.
No nos hacemos ilusiones el triunfo de los trabajadores en México no será electoral, pero también en ese terreno debemos prepararnos para confrontarnos con la burguesía construyendo alternativas de lucha y de organización.

Ver también: Las elecciones del 2010 y las tareas de los marxistas

Fecha: 

7 de julio de 2010

Periódico: 

Nacional: