La historia de el conflicto petrolero, es en gran parte la lucha por los grandes capitalistas extranjeros por apropiarse directamente de los recursos derivados del petróleo mexicano, la lucha por una posición estratégica  de frente a la batalla por la acumulación del capital a nivel internacional.

Los años veinte del siglo pasado se convirtieron en un punto importante para la historia de las luchas petroleras, el panorama al nivel nacional era caótico y el ambiente internacional se caracterizaba por una sucesión vertiginosa entre crisis revolucionarias y periodos de reacción.

Para 1923 bajo el gobierno de Obregón, se iniciaba un conflicto en el “Águila” compañía  británica. En 1924, tras varios intentos fallidos, reprimidos y disueltos por el Ejército, se emplazó a huelga en Tampico  contra la refinería "El Águila", en la cual los trabajadores resultaron triunfantes al lograr que la empresa reconociese al sindicato y se concertase la firma de un contrato colectivo de trabajo.

En ese mismo año termina el periodo de Obregón y empieza el de Calles, quien recibe el gobierno con la mismas problemática e igual trato les da, pero se avecina un periodo más grave: el del la crisis del 29,  los modelos keynesianos aplicados para EE.UU. por Roosevelt en el llamado “New Deal” estaban muy alejados de ser aplicables a Latinoamérica y mucho más al conflicto petrolero. Los años treinta tras la gran depresión y la crisis del mercado mundial orillan a la búsqueda de expandir las actividades petroleras, pero con una falta de capital muy grave. En1934 es electo  presidente Lázaro Cárdenas y también se crea  Petromex, S.A. (después PEMEX)  que tiene como objetivo la creación de una industria “genuinamente nacional” que  sostendría a  las empresas y evitaría las reservas de las grandes empresas extranjeras. Para hablar en términos realistas Cárdenas era consciente de que sólo la energía barata, subsidiada por el Estado permitiría el surgimiento de una burguesía mexicana realmente moderna.

El 16 de agosto de 1935 se constituyó el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, la primera acción  fue la redacción de un proyecto de contrato en el que se solicitaba una jornada de 40 horas y el pago del salario completo en caso de enfermedad y que pretendía sustituir los distintos contratos colectivos que regían las relaciones laborales en las compañías petroleras. El 3 de noviembre de 1937 se les exigió la firma del contrato colectivo y el 17 de mayo el sindicato emplazó a huelga en caso de no cumplir tal demanda. La lucha de los trabajadores petroleros fue bien vista por la población, ante lo cual el presidente estaba obligado a actuar si no quería verse rebasado por el protagonismo obrero.

Las masas apoyaron la lucha a pesar de los problemas causados por la escasez de petróleo. Al no tener  respuesta, se realizan paros de labores en diferentes ocasiones,  la Junta de Conciliación y Arbitraje da el fallo a favor del sindicato, se pide el cumplimiento de las peticiones y el pago de 26 millones de pesos  de salarios caídos, las compañías petroleras ponen un amparo que se les niega. Esto hace que se declaren en rebeldía plena lo que ocasiona que la autoridad máxima judicial emita su fallo señalando el tiempo límite para pagar.

El viernes 18 de marzo de 1938, las compañías extranjeras, que ya habían sido avisadas por gente dentro del gobierno, que el presidente  planeaba algo "fuerte" en contra de ellas, declararon en el último momento estar dispuestas a hacer el pago, pero el presidente Cárdenas ya había tomado una decisión: a las 10 de la noche declaró la expropiación mediante la cual la riqueza petrolera, que explotaban las compañías extranjeras, se volvió nominalmente propiedad de la nación.

Setenta años después podríamos decir que se ha agregado una pieza  más a este conflicto llamado “la lucha por el petróleo” el cual realmente nunca ha dejado de ser codiciado por el capital trasnacional, esta vez con la característica de que se intenta privatizar, es decir dejar en manos de extranjeros. Parecería que se quiere regresar en los años, pero es claro que muchas cosas han cambiado y  actualmente, la privatización no sólo se refiere a dejar en manos de empresarios extranjeros sino que también sus socios de la burguesía nacional, que son casi lo mismo.

Esto aún no ha terminado y la moneda sigue en el aire, pero nos debe quedar claro que históricamente sólo se han conseguido ganar mejores condiciones para la clase obrera a través de la lucha combativa y de clase, así es y seguirá siendo utilizando recursos como los paros, las huelgas y otros métodos.

Existen muchísimos ejemplos, no sólo en el país si no a nivel internacional, como es el caso de Venezuela con Hugo Chávez, donde el movimiento de masas demostró ser mucho mas poderoso que cualquier maniobra política.

Sobre AMLO, sobre las bases del PRD y los sindicatos recae esta nueva lucha, el hacer un llamado a la huelga general estaría demostrando la capacidad que tiene el pueblo mexicano para estar a la altura de los trabajadores de los treinta, que son los verdadero héroes de la lucha por el petróleo.