Para vencer a la oligarquía es necesaria la unidad del Morena, los sindicatos y la OPT

Escrito por: 

Carlos Márquez

La guerra contra el narco ha tenido como unos de sus principales objetivos militarizar al país y dispersar al movimiento de los trabajadores, atemorizándolo y atomizándolo. Esta era una guerra necesaria para la burguesía quienes buscaban desactivar el proceso revolucionario iniciado en el 2006. Además de la guerra hemos vivido uno de los más severos periodos de ataques contra la clase obrera y las masas empobrecidas. Vivimos una ofensiva generalizada contra las conquistas de los trabajadores acompañada de golpes selectivos contundentes como los ataques al SME, Mineros, Mexicana de Aviación, ataques al magisterio, etc.

En todo este periodo la burguesía se ha enfrentado a una férrea resistencia por parte de la clase obrera. La burguesía no tiene margen de maniobra en medio de una de las más severas crisis del capitalismo y no cederá fácilmente a los ataques. Lo que ha impedido al movimiento obrero revertir estos golpes y pasar a la ofenciva es la falta de unidad en el movimiento y del empleo de medidas más radicales como la huelga general. Con periodos de avance y retroceso hemos visto una enorme disposición de lucha por parte de los trabajadores frente a ataques como las reformas a la ley del ISSSTE, el intento de privatizar PEMEX, el cierre de LyFC, etc. La dirección de los sindicatos y de los partidos de izquierda han jugado en general un elemento de contención de la lucha de los trabajadores. En los casos donde los dirigentes están dispuestos a impulsar la lucha contra el actual gobierno ésta se ve menguada por el uso de métodos reformistas y burocráticos.
La actual táctica de la burguesía ha conseguido contener temporalmente la lucha pero no ha logrado detener el proceso de toma de conciencia de las masas, la clase obrera y sus sectores más activos y avanzados. Un ejemplo claro lo tenemos en la lucha contra la guerra donde hemos vivido movilizaciones en muy diversas partes del país mostrando, entre otras cosas, la perdida de apoyo de la pequeña burguesía al gobierno espurio, pero más importante que eso vemos a masas empobrecidas sacando conclusiones muy avanzadas como es el caso de las organizaciones de Ciudad Juárez que exigen la caída del gobierno de Calderón o casos como el de pueblos como Cherán, Michoacán, que se han levantado en armas para defenderse de los ataques de los talamontes ligados a los narcotraficantes. Por un lado vemos la extensión de la barbarie y por el otro los intentos de los trabajadores de romper con el actual caos generado por el putrefacto capitalismo. El descontento de las masas tarde o temprano encontrará su cause y se expresará de gran manera en las organizaciones de masas de la clase obrera.
La formación del MORENA en un sentido más amplio y la creación de la Organización Política Nacional (OPN), impulsada inicialmente por el SME, son expresiones de la búsqueda de los trabajadores de una organización de lucha capaz de enfrentar seriamente a la burguesía, dada la incapacidad que han tenido partidos como el PRD y viendo las limitaciones que tienen las organizaciones sindicales para dar una lucha más amplia.
El diario La Jornada publicó el 15 de agosto una  interesante entrevista a AMLO en la que el dirigente de izquierda señala que: "dentro del PRD, las bases están con nosotros. Sus dirigentes tienen los aparatos, el cascarón, pero Morena tiene vida propia".  Deja en claro las razones por las cuales construyó un movimiento paralelo al PRD: “Pensé que los dirigentes (del PRD, sobre todo) no iban a aguantar ni a resistir las presiones del gobierno y que nos traicionarían. Por eso rechacé ser coordinador del Frente Amplio Progresista y en buena medida por eso acepté la ‘presidencia legítima’. Sabía que nos darían la espalda, como sucedió.”
En torno a la figura de AMLO se están organizando cientos de miles de trabajadores a nivel nacional, ese es el enorme temor de la burguesía y por ello intenta impedir que sea el candidato por parte del PRD apoyándose en los dirigentes vendidos de este partido. Se realizará una consulta nacional para ver si Marcelo Ebrad o AMLO será él candidatos del Sol Azteca. AMLO en un inicio ha señalado aceptará este mecanismo y los resultados, pero esta consulta puede ser usada por la oligarquía en el poder, manipulándola (como lo hicieron cuando inicialmente aprobaron a través de consulta la alianza PAN-PRD en el Edomex). La moneda sigue en el aire, pero si el PRD no pone a AMLO de candidato éste lo será del PT-Movimiento Ciudadano (Antes Convergencia) y el MORENA. Sea candidato AMLO del PRD o no, como MORENA nos enfrentaremos a una lucha contra la oligarquía, demás sectores de la burguesía y la burocracia de derecha del PRD.
El MORENA señala la necesidad de diversos métodos de lucha mientras que sean pacíficos, pero la esencia de la estrategia va orientada al triunfo electoral y a esta lucha se subordinan los demás métodos. Esto es algo que ha sido bastante criticado por elementos agraviados durante el actual gobierno como es el caso de sindicatos como el SME. La comisión nacional organizadora y promotora de la OPN en su Manifiesto a la Nación señaló:
"Ante la inexistencia de una organización política de izquierda representativa del pueblo trabajador, se hace indispensable que organicemos una nueva fuerza basada directamente en los movimientos sociales, con un proyecto claramente clasista, popular y de izquierda para desde ahora y sin esperar a los “tiempos políticos” que el propio sistema marca, combatir con efectividad al régimen oligárquico y sus comparsas.
"Estamos llamando a construir el instrumento político de l@s trabajador@s y el pueblo, una fuerza política que posibilite la construcción del poder popular y social que habrá de reemplazar al viejo y anacrónico régimen político".
La OPN podría constituirse en un pequeño partido con una base fundamentalmente proletaria, esto potencialmente seria un gran paso al frente. Hay un debate en los sectores clasistas del sindicalismo y en la misma OPN, si esta niega la existencia del MORENA o no reconoce que en su seno se aglutinan miles de trabajadores dispuestos a combatir al actual sistema se corre el riesgo del aislamiento y el sectarismo.
Corrientes sindicales como las agrupadas entorno a la secciòn XVIII del magisterio en Michoacán señalan, desde nuestro punto de vista, el camino a seguir. Los sectores avanzados del movimiento obrero no deben aislarse del conjunto de la clase, la clase obrera debe intervenir en el movimiento de masas con su propio programa y sus propias demandas. La OPN debe asumir un claro programa proletario que aspire a acabar con el sistema capitalista y debe o bien integrarse al MORENA como una corriente organizada o mínimamente hacer un frente único con el mismo.
Los marxistas consideramos que la lucha electoral bajo ciertas condiciones puede ser muy útil a la causa de la clase obrera, pero esta es un método de lucha más y ni siquiera es nuestra herramienta fundamental. En las elecciones luchamos en la trinchera del enemigo que tiene muchas armas que puede usar a su favor como lo vimos en el 2006. Nos parece un error que el MORENA centre toda su estrategia a la lucha electoral. Eso ha llevado a que otros sectores de los trabajadores vean con desconfianza este movimiento. ¿Cómo puedes decirles a los trabajadores del SME o Mineros o a los afectados directos de guerra contra el narco que esperen a derrotar al PRI y al PAN en las elecciones del 2012 para resolver sus problemas? ¿Tendremos que esperar otros 6 años si hay un nuevo fraude o el movimiento no es capaz de derrotar a la burguesía en las elecciones?
Nosotros consideramos que el MORENA debe apoyarse firmemente en la organización desde las bases, que una tarea fundamental es la formación y consolidación de los Comités Seccionales y Sectoriales. La campaña electoral y la defensa del voto son tareas importantes, pero más lo es estar preparados para realizar acciones más radicales para echar abajo un nuevo fraude electoral o bien boicots de la burguesía frente a los cambios que realice un gobierno de izquierda. Consideramos que en el 2006 nos faltó organización y medidas más firmes como la realización de una huelga general. En la entrevista arriba mencionada ante la pregunta expresa de por qué no se fue más lejos en ese año, AMLO dice que algunos pedían claudicar y otros casi casi tomar las armas, para más adelante señalar:
"La violencia no hubiera resuelto el problema. Ahí está el ejemplo de Egipto: 800 muertos, y el resultado es una junta militar en el gobierno y una revolución traicionada (La Jornada, 15 de agosto de 2011)".
Nos parece que el compañero Obrador pone en este caso un mal ejemplo, el pueblo egipcio no generó la violencia,  esta provino del régimen podrido proimperialista de Mubarak,; si los trabajadores no hubieran mostrado tal disposición de lucha y la clase obrera no hubiera entrado en escena parando la producción con sus huelgas, muy probablemente hubiéramos vivido masacres mayores. El problema ha sido que los trabajadores no contaban con ninguna dirección ni organización que pudiera sustituir al régimen que derrocaron, la única solución real era que los trabajadores tomaran el poder en sus manos y expropiaran las riquezas del régimen de Mubarak poniéndola a disposición del conjunto de la sociedad. Los trabajadores egipcios no contaban con una dirección pero en el 2006 lo que sería la CND si contaba con una dirección y la APPO en Oaxaca nos mostraba el camino a seguir, el no haber tomado acciones como una huelga general que impidiera la imposición de Calderón nos ha costado ya más de 50 mil muertos en la supuesta guerra contra el narco. Si en verdad queremos triunfar y cambiar radicalmente nuestra sociedad debemos aprender de nuestra experiencia y nuestros errores.
Nos guste o no todo parece indicar que las elecciones presidenciales del 2012 serán uno de los principales escenarios de la lucha de clases en el próximo periodo. Para ganar, el movimiento de los trabajadores debe romper con los elementos más oportunistas como es el caso de "Los Demócratas de Izquierda" dentro del PRD (Chuchos y CIA); nosotros estamos a favor de la unidad del movimiento obrero por eso debemos expulsar a los dirigentes que ya se vendieron a la oligarquìa. Sindicatos, la OPN (o como se decida nombrar en el futuro), el MORENA y demás organizaciones de los trabajadores deben hacer un frente único contra la burguesía y sus partidos: el PRI y el PAN.  Se debe fortalecer la organización desde las basases teniendo especial atención en la formación de comités en los centros de trabajo para poder impulsar en un momento determinado la huelga nacional si es que los acontecimientos nuevamente  nos lo exigen.
Los fuertes golpes al sindicalismo y las elecciones en el Edomex nos muestran que la burguesía atacará e intentará mantenerse en el poder con uñas y dientes. En el actual periodo de crisis severa del capitalismo donde la burguesía tiene un programa  de recortes severos y ataques contra la clase obrera no es posible vencer con luchas aisladas. La clase capitalista es un sector parasito de la sociedad, nosotros los trabajadores somos potencialmente más fuertes que ellos, es necesario un frente único de las organizaciones de los trabajadores y así echar de una vez por todas a los gobiernos títeres de la oligarquía y el imperialismo.

*Este artículo fue escrito antes de la conformación oficial de la Organización Política Nacional de Trabajadores y el Pueblo (OPT), por eso en el transcurso del mismo se utiliza el termino OPN.

Fecha: 

Agosto de 2011

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