Luchas Magisteriales encabezadas por la CNTE

Escrito por: 

Guillermo Flóres

Antes de que se formara la coordinadora nacional de trabajadores de la Educación (CNTE) en el magisterio existieron diferentes corrientes que encabezaron luchas políticas y económicas. Una de estas corrientes fue el movimiento Revolucionario del magisterio (MRM) de la sección novena de profesores de primarias del distrito federal.

 

El MRM fue dirigido por Othon Salazar, esta corriente en 1956 levantaba la demanda del 30% de aumento salarial y por otro lado pedia el reconocimiento de su comité seccional que había sido elegido democráticamente por una contundente mayoría de trabajadores. A partir de 1956 y alrededor de 4 años el MRM fue el eje aglutinador de importantes luchas magisteriales de masas en el DF. Así, en todos los estados existían corrientes de izquierda que dirigían luchas, pero el común denominador de estas luchas es que se daban de forma aislada.

 

La formación de la CNTE se da en un ambiente de una crisis financiera en el país, uno de los estados más afectados fue Chiapas, el descontentó se hace notar atreves de los profesores. Delegaciones sindicales de algunas entidades de Chiapas se lanzan a un paro en demanda de la descongelación de los sobresueldos. En poco tiempo el paro se generaliza en las escuelas chiapanecas. Para ser más exactos el 4 de junio de 1979 el movimiento se había extendido a 48 delegaciones de la sección 7 de Chiapas, 10 mil maestros, casi un 70% de los trabajadores.

 

Dada la magnitud del descontento el CEN del SNTE se vio obligado a firmar un documento junto con el recién creado consejo central de lucha (CCL), donde pedían el 100% de aumento a los sobresueldos o sino en todo caso estallarían un paro indefinido el 16 de septiembre.

 

En aquellos momentos el comité seccional de Chiapas y el CEN del SNTE se encontraban controlados por la camarilla charra de Jongitud Barrios.

Aun a pesar de que había corrientes de izquierda, los trabajadores chiapanecos en primera instancia expresaron su descontento a través de su sindicato, aun siendo charro.

 

Esto confirma lo que los marxistas hemos defendido. Los trabajadores siempre se orientan a sus organizaciones tradicionales, aun a pesar de sus direcciones y hay casos en los que antes de salirse de ellas intentan cambiarlas una y otra vez.

Nunca se orientan en un primer momento a organizaciones pequeñas. Pero también tendríamos que agregar que organizaciones pequeñas con un trabajo organizado y sistemático pueden llegar a ganar a la mayoría de los trabajadores.    

Al no existir una respuesta, el paro indefinido estalla y más de 15 mil maestros se manifestaban en solución a sus demandas.

En ese mismo ambiente, maestros de la montaña de guerrero, firman un  documento, el 13 de octubre, con representación de 3500 trabajadores, de igual forma exigían 50% de aumento al salario, 100% de aumento a los sobresueldos y construcción de clínicas del ISSSTE.

 

En el mes de octubres también estallan paros en secundarias técnicas en la comarca lagunera, frontera entre Durango y Coahuila.

 

Después de 29 días los trabajadores de Chiapas levantaban el paro al aceptar 1500 pesos mensuales y el reconocimiento del CCL como representativo de los maestros.

 

Pero el fermento ya se había extendido por Tabasco y Guerrero, en ese ambiente de lucha se convoca el 17 y 18 de diciembre de 1979, en Tuxtla Gutiérrez Chiapas al primer foro nacional de trabajadores de la educación y organizaciones democráticas del SNTE.  Diferentes expresiones magisteriales democráticas se hacen notar: El MRM, CCL de Chiapas, CCL de Tabasco, Consejo Sindical del Magisterio de Guerrero, Consejo Regional de la Región Lagunera, Coordinadora de Trabajadores Administrativos y Manuales del I.P.N, el BRVM (Sección 36 del SNTE), Comisión Nacional de Maestros Coordinadores de Telesecundarias (CNMCT), trabajadores administrativos y académicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia(INAH), el Frente Magisterial Independiente Nacional (FMIN) de tendencia maoísta, entre muchas otras corrientes de casi todos los estados del país.

 

Quedaba claro que el charrísimo sindical no encabezaría ninguna lucha por mejoras para los trabajadores, en ese tenor y dado el gran numero de corrientes de izquierda dentro del SNTE, se necesitaba crear una organización que unificara todos los grupos y las luchas a nivel nacional. Nace así la CNTE la corriente de izquierdas dentro del sindicato (SNTE).

 

En ese foro hubo algunas voces que llamaban a salirse del sindicato y formar un sindicato independiente, pero acertadamente la gran mayoría voto a favor de luchar por la democratización del SNTE. Esto implicaba participar en las convocatorias del CEN del SNTE y participar en los congresos seccionales con su propia terna oponiéndose a las ternas charras, intentando ganar la estructura sindical para la CNTE.

 

La lucha por la democratización de la SNTE no iba a ser una cuestión sencilla, sin embargo tener claro que lo fundamental en el terreno político era levantar la consigna de la democratización total era correcto.

 

Y si hubieran optado por salirse del SNTE, hubieran dejado a las masas de trabajadores bajo la influencia del charrismo sindical. Leamos que dice Trotsky en su documento sobre los sindicatos de Gran Bretaña “…..No basta con ofrecer a las masas otro lugar a donde dirigirse. Hay que ir a buscarlas donde están y guiarlas. Los izquierdistas impacientes dicen a veces que es absolutamente imposible ganar a los sindicatos por que la burocracia usa el régimen interno de las organizaciones para preservar sus propios intereses ¿Entonces para que gastar tiempo y energías?....abandonemos la lucha concreta por ganar a las masas, usando como pretexto el carácter corrupto de la burocracia sindical.”

 

La CNTE dejaba en claro que la única manera de democratizar la SNTE era movilizar a los trabajadores sin salirse del sindicato, pero también entendía que era importante luchar por demandas económicas concretas.

 

Era de esperarse que los Charros del SNTE en ese momento, encabezados por Carlos Jongitud Barrios, no lo vieran con buenos ojos, al grado que comenzó una campaña de desprestigio en algunos diarios de la época. Sin embargo no fue suficiente, las corrientes democráticas habían creado una herramienta poderosa con capacidad de movilizar a grandes masas de trabajadores del magisterio.

 

LUCHAS POSTERIORES A LA FORMACION DE LA CNTE

 

Dentro del segundo foro de la CNTE de febrero de 1980 una de las principales reivindicaciones de la CNTE era el llamado a la movilización de los trabajadores por  obtener mejoras laborales y democratizar al SNTE.

 

En todos los estados había descontento por una u otra razón, sin embargo todas sus luchas las habían llevado de manera aislada, ahora con la formación de la CNTE miraban la posibilidad de que las luchas se vincularan. Y aunque así ocurrió en los principales estados movilizados, no así en zonas aisladas, la CNTE encontraría dificultades debido a que en algunos casos las corrientes tenían diferencias y no se trataban de la mejor manera. Pero a pesar de ello el movimiento era mucho más fuerte y obligaba a los dirigentes a ponerse de acuerdo.

 

Las diferencias políticas al interior de las organizaciones, no es síntoma de debilidad o degeneración, muy por el contrario es muy sano tener diferencias. Si estas se discuten de forma camaraderil, no solo ayudan a fortalecer el movimiento también ayuda a elevar el nivel de conciencia de los trabajadores. Pero a pesar de todos los problemas que podría tener la CNTE, a partir de su formación fue el ente organizador del magisterio democrático.

 

A principios1980 el llamado de la CNTE movilizaba a miles en Hidalgo, Guerrero, Oaxaca, Morelos, Puebla, Tlaxcala, Querétaro, Durango, Michoacán, Valle de México, Sonora y Mazatlán Sinaloa principalmente, con demandas económicas de aumento salarial. Más de 150 mil trabajadores en todo el país se movilizaban. El foco era Oaxaca, el 2 de mayo estalla un paro indefinido, exigiendo 60% de aumento salarial y pago de salaros devengados. Por todas las zonas de Oaxaca se creaban comités de lucha en respuesta al control férreo del charrismo sindical, después de mes y medio de paros y multitudinarias manifestaciones, se lograba el aumento del 22% y el reconocimiento del CETEO comité nombrado por la base de trabajadores en lucha.

Con la lucha de Oaxaca, se fortalecieron otros movimientos, Morelos mantenían tomado su edificio sindical, desconociendo a los charros del SNTE. En el Valle de México se movilizaban 15000  trabajadores, Nezahualcoyotl, Ecatepec, Naucalpan y Texcoco principalmente, este era un movimiento que se fortalecía, seguramente ahí encontraremos las causas que provocaron el asesinato de Misael Núñez Acosta.

 

El movimiento morelense desconoce al comité charro local y forma una comisión ejecutiva, comenzando la lucha por el reconocimiento legal. Chiapas también llevaba a cabo una lucha por el desconocimiento de su comité ejecutivo respaldado por el jonguitudinismo. Para entonces la CNTE llamaba a manifestaciones masivas en respaldo de Morelos y Chiapas. A principios de noviembre de 1980 los profesores Chiapanecos lograban que se reconociera un comité donde el 50% de era gente de la CNTE, unos días después ocurría lo mismo en Morelos.

 

El Valle de México, Hidalgo y Guerrero llevaban a cabo paros y manifestaciones masivas logrando que 5 carteras del los comités seccionales fueran para los integrantes de los consejos centrales de lucha (CCL) de estos estados. Los CCL´s eran el ala de izquierda en los estados que estaban ligados a la CNTE.

 

Para noviembre de 1981 nuevamente comenzaba un auge del movimiento magisterial, contingentes de Chiapas, Hidalgo. Oaxaca, Morelos, Valle de México, retomaban demandas económicas. Estos paros y movilizaciones continuaron hasta principios de 1982, con la Asamblea Nacional de la CNTE celebrada en Cuernavaca el 7 de Febrero de ese año, se acordaba luchar por la presentación del profesor Ezequiel Reyes Carrillo que había sido secuestrado y baleado y el esclarecimiento del asesinato de Misael Niñez Acosta y solución a cada unos de los pliegos económicos de los contingentes de los estados.

 

El estado más representativo en este proceso era la sección VII de Chiapas, casi el 90% de trabajadores paraban las escuelas y se ratifico cuando el 21 de febrero casi 50 mil personas marchaban rumbo al zócalo de Tuxtla Gutiérrez. Cabe destacar que a mediados de este año (1981) la sección 7 había logrado democratizar su sección y meses después el comité seccional de Oaxaca seria también parte de la CNTE.

 

En un congreso realmente democrático de la sección 19 de Morelos la CNTE obtiene la secretaría general pero el CEN del SNTE no lo reconoce y en su lugar nombra un comité a modo. En Pachuca una manifestación era reprimida cerca del local sindical, los vanguardistas disparaban contra los manifestantes, en la cual 7 maestros miembros del CCL eran asesinados. En general, a finales de 1981 no se había resuelto ninguna de las demandas económicas de la CNTE. Ante esta situación la CNTE convoco a un paro el 2 de diciembre de 1981.  A finales de enero de 1982 después de haber pasado la vacaciones la CNTE nuevamente convoca a paros con la demanda del 50% de aumento, la aparición inmediata del profesor Reyes Carrillo que había sido secuestrado y el esclarecimiento del asesinato de Misael Nuñez, Alejo Reyes Reyes, entre otros profesores que habían sido asesinados. En los tres primeros meses la CNTE continuaba con paros y movilizaciones. A pesar de las movilizaciones de masas que había encabezado en Morelos, Hidalgo y Valle de México solo habían logrado algunas carteras en las secciones, los charros Jonguitudistas seguían manteniendo las principales carteras en esos estados.

 

Los años posteriores antes de 1989 la CNTE siempre hizo un llamado a movilizarse, ya sea por aumento salarial o democracia sindical, aunque estas luchas no fueron masivas como la de los años 80’-83’ no dejan de ser relevantes, pues es donde se consolidan algunos logros económicos y políticos para los trabajadores del magisterio. 

 

El CHARRISMO SINDICAL

 

La lucha por la democratización del SNTE no ha sido ni será una cuestión sencilla, el trabajo sindical está lleno de espinas.  Requiere de una gran paciencia y más cuando hay que nadar a contracorriente. La coordinadora (CNTE) está llena de historias trágicas, asesinatos, despidos y trabajadores desaparecidos.

El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) es el sindicato más grande de América latina, fue constituido en el año de 1943,  desde entonces, el SNTE ha sido manejado por cacicazgos: Robles Martínez de 1949 hasta 1972, Carlos Jonguitud Barrios (17 años) y Elba Esther Gordillo desde 1989 a la fecha.

No es que hayan estado dentro de la secretaria general todo ese tiempo, pero después dejaban a algunos de sus títeres.

 

Robles Martínez también fue diputado federal, líder de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado y director del Banco Nacional de Obras Públicas, lo cual le permitió amasar una gran fortuna.

 

El 22 de septiembre de 1972 un grupo armado, dirigido por Carlos Jonguitud Barrios toma por la fuerza el edificio del SNTE y convoco a la celebración del IV Congreso Nacional Extraordinario del SNTE en donde fue “elegido” Eloy Benavides Salinas. El secretario de educación y Luis Echeverría Álvarez entonces presidente los reconoció inmediatamente. Para el día 29 el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje emitió un laudo en favor de Eloy Benavides Salinas, era muy claro, todo había sido planeado desde las altas esferas del poder.

 

Año y medio después, en febrero de 1974, en la Paz Baja California Sur, en el congreso del SNTE, fue elegido Carlos Jongtud Barrios como secretario General. Y es donde formalmente nace la corriente charra Vanguardia Revolucionaria. Esta no solo era una corriente política (charra) de Jonguitud Barrios, también era la herramienta represora del movimiento que contaba con asesinos a sueldo.

 

En los ochentas durante el Jonguitudinismo, por mencionar solo un caso, en octubre de 1983, golpeadores de Vanguardia Revolucionaria con metralletas, pistolas y garrotes tomaban el local sindical de Oaxaca.

En 1976,  con la llegada de  José López Portillo la posición de Jonguitud Barrios se fortalece, dado que poco antes José Luis Andrade Ibarra  entonces secretario general y títere de Jonguitud utilizo la estructura del SNTE para movilizar a profesores a favor del candidato oficial.

 

Elba Esther Gordillo en 1975, con el apadrinamiento de Jonguitud Barrios,  ya era secretaria de Acción Social y coordinadora de Vanguardia Revolucionaria en la sección 36 de Valle de México. Ya entonces miembro del PRI, de donde llegaría a ser diputada federal.

 

Gordillo en 1977 asume la secretaria General de la sección 36 el Valle de México, las reseñas de los trabajadores disidentes cuentan cómo a pesar de haber obtenido una votación minoritaria de 77 a 200 votos con su contendiente, de una manera vil y descarada le dan la secretaria General a Gordillo.

 

En 1983 ocupa la cartera de trabajo y conflictos de preescolar y primarias para después pasar a la  Secretaría de Finanzas del nacional.

 

A finales de 1989, Salinas de Gortari intentaba impulsar a Elba Esther Gordillo a la secretaria general nacional, sin embargo en el congreso paso desapercibida. Nuevamente Jonguitud ponía a uno de sus incondicionales. Pero la grandiosa lucha magisterial del 89 estaba a punto de estallar, la más importante en la historia de la CNTE, orillaba a salir del sindicato a Jonguitud Barrios.

 

Así pues, apoyada por Carlos Salinas de Gortari y ante el descontento magisterial llegaba a la secretaria general en 1989.

 

En Febrero de 1992 es reelegida de forma antidemocrática. Ya otra vez en la secretaría general y con la intención de eternizarse en el sindicato, crea nuevos estatutos. Para esta tarea forma un equipo con Camacho Solís, entonces regente de la ciudad de México, y dos de los encargados para realizar ese trabajo es Marcelo Ebrard Casaubon y Jesús Ortega Cuevas.

 

Hasta la fecha se calcula que la fortuna personal de Gordillo asciende a 300 millones de dólares. Tiene propiedades en Francia, Inglaterra, Estados Unidos y Argentina. Pero seguramente la fortuna de EEG nada tiene que ver con los 2 mil millones que recibe al año por concepto de cuotas sindicales, que por cierto todos los trabajadores de la educación desconocen en que se gastan.

 

 

MISAEL NUÑEZ ACOSTA

 

Misael Núñez Acosta era profesor de primaria en una escuela en el municipio de Ecatepec, era uno de los más reconocidos dirigentes de la CNTE de la sección 36 del Valle  de México.  Cuando llego a la zona de Tulpletlac en 1974 fue el principal organizador de colonos y obreros manufactureros.

El 30 de enero de 1981 en Tulpetlac, Ecatepec, se reunía en la primaria Héroes de Churubusco donde estaba con más de 200 profesores y obreros preparando el paro magisterial del 2 de febrero, por la noche salía acompañado por el profesor Darío Ayala y un obrero Isidro Dorantes.

 

Tres individuos a bordo de un Chrysler Le Barón robado disparaban a menos de un metro de distancia, el único sobreviviente era el profesor Darío Ayala. Posteriormente los asesinos fueron localizados y detenidos en San Luis Potosí, donde por cierto el gobernador era Carlos Jonguitud Barrios. Fueron sentenciados a 30 años de presión. Las investigaciones demostraron que Clemente Villegas había pagado 300 mil viejos pesos para llevar a cabo el acto repugnante. Villegas era un cercano colaborador del entonces Secretario General del SNTE, Ramón Martínez, que a su vez era cercano a Elba Esther Gordillo.

 

Tanto Villegas como los otros 3 implicados fueron llevados al penal de Barrientos, pero algunos días después fueron  trasladados a las cárceles de la perla en ciudad Netzahualcóyotl de donde 6 meses después inexplicablemente se fugarían.

 

Las piezas encajaban muy bien, los autores intelectuales al parecer se encontraban en las altas esferas institucionales del SNTE.

 

Este es uno de los casos más documentados, pero después de Misael vinieron mas asesinatos, el profesor Pedro Palma en Pachuca Hidalgo, Wenceslao López Díaz en Chiapas en 1987 y Cenobio Fito Reyes de Oaxaca, aproximadamente han caído en la lucha 150 profesores, muchos de ellos dirigentes reconocidos de la CNTE.

 

Pero los trabajadores de la educación no se han amedrentado por ningún motivo, continuando con la lucha hasta nuestros días. Y ese es precisamente el mejor honor que les podemos hacer a todos los caídos, continuar con el fortalecimiento de la CNTE en todas las secciones del magisterio.

 

 

LA PRIMAVERA DE 1989

 

En el periodo 1982 y 1989 los salarios de los profesores se redujeron casi en un 52%. En las elecciones de 1988 miles de maestros se orientaban hacia Cuauhtémoc Cárdenas, pero el fraude electoral que llevo a Carlos Salinas de Gortari a la presidencia politizaba más la situación en el país. En el magisterio el charro Carlos Jongitud barrios había donado mil millones de viejos pesos de las cuotas sindicales a la campaña de CSG y había utilizado la estructura del SNTE para promover el voto a favor del PRI.

 

Todo ello aunado a la posibilidad que en el XV congreso nacional que comenzaría el 10 de febrero nuevamente Jungitud Barrios intentaría imponer a uno de sus incondicionales. Pero ahora no sería tan sencillo dado que muchos delegados de las diferentes entidades del país habían sido elegidos democráticamente y eran contrarios a los grupos charriles.

 

A finales de 1988 se miraban los primeros brotes de movilizaciones de trabajadores magisteriales exigiendo pago de un bono de 2 meses y aumento salarial. Unos días después del congreso los trabajadores del magisterio en el D.F comenzaban a organizarse, nombrando representantes de escuelas y a la par convocaban a salir a las calles. Para 15 de febrero de 1989 la CNTE movilizaba a miles en la plancha del zócalo. Las demandas de ese movimiento ahora incluían aumento del 100% y la democratización total del SNTE.

 

La segunda manifestación más grande fue el 22 de febrero 100 mil maestros, movilizándose junto a padres de familia y centenares de sus jóvenes estudiantes.

La conciencia de los trabajadores había cambiado, ahora los maestros hablaban de política, volanteaban, boteaban y paraban las escuelas con casi poca o nula resistencia de maestros opositores. Un importante número de directores e inspectores apoyaban las movilizaciones. Los trabajadores del magisterio, docentes y no docentes estaban dispuestos a llegar hasta el final y así lo demostraron cuando la CNTE en asamblea representativa de todos los estados acordaba estallar el 17 de abril un paro indefinido si no había respuesta por parte del estado.

 

Así el 17 de abril los maestros estallaban un paro indefinido que duraría hasta el 15 de mayo.  En esa grandiosa lucha participaron maestros de 26 entidades del país siendo el foco de insurrección el distrito federal y el valle de México. Casi 750 mil trabajadores docentes y no docentes habían entrado a la vida política. Realmente era impresionante la participación si visualizamos que eran aproximadamente un millón 200 mil trabajadores en todo el país. Las revoluciones son casos excepcionales y aunque esta no era una revolución si era una huelga excepcional multitudinaria de trabajadores de la educación que mostraba que la clase trabajadora tiene un límite y cuando llega ese límite, demuestran la enorme combatividad, disposición y sacrificio que están dispuestos a llevar por cambiar sus vidas.

 

Participaban trabajadores afiliados al SNTE de la sección 10, 11 y 9 del D.F, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Michoacán, Baja california Norte y Sur, Morelos, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Tamaulipas, Yucatán, Zacatecas, la Laguna, el Valle de México, Chiapas, entre otros. 

 

Como era de esperarse las negociaciones con las autoridades (Manuel Bartlett Díaz era el secretario de educación) se dieron de manera muy lenta, intentando desgastar el movimiento, y por el otro lado el sindicato no quería perder sus puestos de dirección.

 

Unos días después la SEP ofrecía al magisterio 25% de aumento al salario base. Además de lograr el aumento, conseguían que maestros democráticos se integraran a los comités seccionales y el movimiento había orillado a la caída  Carlos Jonguitud Barrios. 

 

Como en todos los movimientos no faltaron los grupos ultraizquierdistas, los sectarios y  los oportunistas que en todo momento jugaron un papel de freno del movimiento. 

 

El movimiento se había orientado, como en otras ocasiones, hacia la CNTE. Todos los contingentes de los estados  tenían sus representantes que formaban parte de la coordinadora. La CNTE lograba unificar los movimientos de los estados, demostraba ser una herramienta de lucha importante. Después del 89 y a pesar de la represión que siempre ha existido, el movimiento logro aumentar las libertades sindicales.

 

Sin embargo, tenemos el problema que siempre existió, la falta de una dirección clara y reconocida dentro de la CNTE. La falta de una dirección logro dispersar el movimiento. Los miembros de una dirección deben ser los más entregados, con más experiencia política, disciplinada y probada en la lucha. Todos los estados tenían representantes, solo tenían que ser ratificados en una dirección.

 

¿Por qué decimos esto? Hubo negociaciones en que las autoridades trataban asuntos particulares con trabajadores que solo representaban a unos cuantos y que trataban cuestiones particulares de los estados. Por ellos necesitábamos una dirección centralizada reconocida que tratara los problemas generales como el aumento del 100%, democratización del SNTE, paralelamente a los problemas particulares y no de forma individual y aislada. En esta batalla se obtuvieron algunos logros económicos. La CNTE tuvo la oportunidad de democratizar casi en su totalidad el SNTE y una de la sección más importante del país, la sección 10 en el D.F. pero la falta de dirección y la formación de cuadros previos no lo permitieron.

 

LUCHAS RECIENTES ENCABEZADAS POR LA CNTE

 

Los trabajadores administrativos y docentes de primarias y secundarias en cuanto ingresan a trabajar a la SEP, son afiliados al SNTE. Por ello intentar ganar la estructura del SNTE dirigida por la CNTE no es una cuestión menor, incluso a niveles regionales y locales. Porque desde ahí puedes impulsar la organización y defensa de los trabajadores, que estando en manos del los charros no lo harían. Es decir que teniendo esa estructura del SNTE dirigida por la CNTE puedes impulsar un trabajo de organización. Esto es a lo que nos referimos cuando decimos que no debemos salirnos de las organizaciones tradicionales de los trabajadores o los dejaríamos bajo la influencia de la burocracia charra. La CNTE ha arrebatado comités seccionales enteros como la sección de Guerrero, la 18 Michoacán, la 22 de Oaxaca y 7 de Chiapas.

Desde que se formo la CNTE los acontecimientos importantes han pasado por esta corriente. Actualmente la CNTE ha encabezado la lucha contra la ACE y las reformas a la ley del ISSSTE. Donde hemos presenciado paros y movilizaciones masivas. 

 

Desde el 2004 Fox intento echar andar la reforma a la ley del ISSSTE, sin embargo la CNTE y otras organizaciones consiguieron frenarla. Ya durante el gobierno del espurio Calderón, los legisladores priistas y panistas aprueban la ley del ISSSTE que aparece en el diario oficial de la federación el  31 de marzo del 2007.

 

Casi 2.5 millones de trabajadores se amparaban en las dos etapas, además de encabezar los amparos, la CNTE movilizaba a trabajadores en el D.F, Valle de México, Guerrero, Michoacán, Puebla, Oaxaca, Durango, Guanajuato, Baja California, la sección novena del distrito federal y otros estados.

 

El 15 de mayo del 2008, Elba Esther Gordillo y Felipe Calderón anunciaban la llamada “alianza por la calidad de la educación”. Una serie de reformas que desvanecían los derechos ganados anteriormente. La respuesta no se hizo esperar, nuevamente la CNTE se movilizaba como con la ley del ISSTE. Aunque debemos enfatizar que las luchas más importantes fueron encabezadas por Michoacán, Guerrero y Morelos.

 

Sin demeritar los esfuerzos, en lo concreto las reformas siguen avanzando. Lo que ahora necesitamos es un frente único de trabajadores que impulse una huelga general y no solo eche atrás las reformas, sino también logremos un gobierno de los trabajadores.

 

En el DF, en la madrugada del primero de julio del 2008, alrededor de 187 golpeadores de Gordillo toman el local sindical de Belisario Domínguez. Tenían ya planeado llevar a cabo un congreso amañado. Mientras los profesores democráticos de la CNTE esperaban en el Hotel, Holiday Inn en Tlalpan, en otro lugar  con delegados a modo elegían a un secretario general espurio. Al saber esto los verdaderos delegados elegidos democráticamente nombran a Francisco N. Bravo como secretario general y a la vez deciden también recuperar el local sindical.

 

Un hecho sin precedente es la grandiosa insurrección de trabajadores en Oaxaca. El 22 de Mayo del 2006,  70.000 trabajadores de la sección 22 de Oaxaca estallan un paro indefinido después de que Ulises Ruiz no da respuesta a sus demandas. Al mismo tiempo instalaban un plantón que sería brutalmente reprimido el 14 de junio, esa sería la chispa que encendería la mecha. Inmediatamente los maestros recibieran apoyo de las comunidades, formándose unos días después la APPO donde participaban más de 300 organizaciones. Las marchas llegaban a ser hasta de 800 000 mil trabajadores. Hubo momentos en que Ulises Ruiz prácticamente no existía, el verdadero poder estaba en manos de la APPO. Esta lucha que comenzó la sección 22 de Oaxaca y que unifico a los trabajadores, pudo extenderse a otros estados sin embargo se careció de una política clara.

 

 

LAS ORGANIZACIONES DE MASAS

 

Desde la formación de la CNTE ha sido una organización de masas y los trabajadores se han orientado hacia ella.

 

Aunque la lucha por la democratización del SNTE no ha sido ni será fácil, una de las estrategias más importantes de la CNTE es precisamente no abandonar el sindicato y dar la lucha desde a adentro. Desde las épocas de Jonguitud Barrios y Elba Esther Gordillo el charrismo sindical, se ha caracterizado por corrupción, vandalismo, asesinatos y detrimento de derechos laborales de los trabajadores.

 

No cabe duda que gracias a las luchas encabezadas por la CNTE los trabajadores del magisterio siguen conservando ciertos derechos laborales. Pero esto no será por siempre lo que un día lograron los trabajadores, al siguiente día nos lo quitaran. Así lo vemos ahora con la ley del ISSSTE y la ACE que son un retroceso en los derechos laborales de los trabajadores.

 

La lucha sindical es de suma importancia como lo hemos visto con las luchas magisteriales, sin embargo es limitada. La CNTE tiene que contemplar el derrocamiento total del gobierno de la burguesía. La creación de un partido revolucionario que logre aglutinar todas las fuerzas de los trabajadores en la lucha por el socialismo debe estar dentro de la orden del día.

 

El gobierno de calderón pudo haber sido derrocado en el 2006, el PRD tuvo la oportunidad de llamar a un frente único de trabajadores, sin embargo su dirección reformista nunca tuvo esa perspectiva. Entonces pues tenemos que trabajar en la formación de un partido con una dirección revolucionaria.

 

El gobierno de la burguesía se encuentras envalentonado por los golpes asentados a los trabajadores y ahora con el más reciente, la desaparición de Luz y Fuerza del Centro. Esto no significa que todo haya terminado, los trabajadores volverán a levantar la cabeza y tal vez más pronto de lo que pensamos.

 

En la CNTE, ahora más que nunca, es necesario que pueda consolidarse una dirección, representativa de todos los comités de los estados, que pueda orientar las luchas venideras. En la historia de la CNTE, este ha sido uno de los problemas, la falta de una dirección a nivel nacional, el comité ejecutivo nacional democrático podría ser una oportunidad para llevarla a cabo, analizarlo con más detalle es nuestra obligación.

 

Dada la situación en nuestro país, no podemos descartar que pronto estemos presenciando acontecimientos convulsionantes que hagan temblar a la burguesía. Retomemos la rica experiencia del movimiento obrero y la teoría marxista que es una herramienta fundamental en la lucha por la emancipación de la clase obrera.  

Fecha: 

20 de Marzo de 2010

Teoría Marxista: 

Nacional: