Como parte de las lecciones aprendidas en el movimiento que sacudió a Oaxaca y al mundo entero, conformado por la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), una gran capa de la sociedad, incluidos los jóvenes, entendieron que tanto las fábricas como los medios de comunicación deben de estar al servicio del pueblo, de la clase trabajadora.

Hacer contrapeso de alguna manera a los grandes monopolios televisivos, es el objetivo de las decenas de Radios Comunitarias que han surgido en el estado de Oaxaca, en particular en Juchitán Oaxaca, donde surge Radio Totopo, que transmite el 95% de su programación en lengua zapoteca y que se ha caracterizado por abordar temas de interés social y de las luchas nacionales e internacionales. Hace un año del intento de cierre de esta emisora por parte del gobierno federal, utilizando a la PFP para sacar de la frecuencia a 14 radios independientes más.

Radio Totopo resistió y conformó el espacio de comunicación del Istmo, espacio que aglutina a proyectos organizativos que luchan contra los proyectos eólicos que se instalan en La Ventosa en el municipio de Juchitán y que se enmarcan en el proyecto ya desde antes conocido como Plan Puebla Panamá. Xhiñi Gabiaa´ Radio, parte también de este proyecto, es un espacio radiofónico que transmite desde la ciudad de Puebla bajo la dirección del Movimiento Estudiantil Zapoteca-Cabani´, formado por estudiantes originarios del Istmo Oaxaqueño y que utilizan la tecnología para difundir las costumbres oaxaqueñas, combinándolo además con análisis marxista y la difusión de sitios electrónicos como militante.org, marxist.com y manosfueradevenezuela.org.

Como dice un spot radiofónico, que se transmite desde Puebla y en Oaxaca, para comprender que le pasa y cambiar a nuestro pueblo, tenemos que verlo inmerso en la situación nacional y mundial. Ya que México y el mundo entero están padeciendo ya los efectos de una que amenaza ser la peor crisis económica en ochenta años que ha sacudido el epicentro del capitalismo mundial, el imperialismo yanqui. Explicando que los trabajadores no tenemos otra vía, la única manera de frenar los nocivos efectos del la catástrofe capitalista es eliminando junto al Estado burgués, a la propiedad privada sobre las principales palancas de la economía, para ponerlas bajo el control de los trabajadores.

21 agosto 2009