Nuestro Programa

Tendencia Marxista Militante
domingo, 25 de septiembre de 2005

Nuestro Programa (El Programa de la Juventud)

Pese a esbozar en líneas muy generales lo que somos y lo que defendemos en distintos planos del movimiento, pasaremos ahora a señalar nuestra plataforma reivindicativa. En este aspecto enarbolamos demandas que señalan la necesidad urgente de un tránsito a la lucha por el socialismo partiendo de las necesidades concretas de los sectores oprimidos. Para nosotros la distinción entre programa mínimo y máximo es sólo una forma de evadir la necesidad de luchar por el socialismo.

Un programa de transición en un país dependiente como México debe partir de cumplir las aspiraciones democráticas y de emancipación nacional que la burguesía no ha podido ni ha querido cumplir.

Desde la lucha por la independencia, México ha vivido en dos siglos, revoluciones y contrarrevoluciones con una presencia de elementos protoburgueses y burgueses que han sido incapaces de establecer una auténtica independencia nacional, un desarrollo del campo, una vida digna para el conjunto de trabajadores, una auténtica equidad de géneros, un pleno desarrollo de la multitud de pueblos y culturas que conforman nuestro país.

La burguesía no fue capaz antes y no lo será mañana, menos aún cuando juega claramente el papel de simple lacaya del capital internacional.

Le corresponde a la clase obrera, a los campesinos pobres, a los jóvenes y al conjunto de sectores explotados luchar por un programa de emancipación nacional, que en los hechos no puede ser otro que un programa socialista.

La clase obrera y el empleo

El desempleo es una enfermedad crónica bajo el capitalismo. ¿Qué podemos esperar de este sistema cuando es incapaz de ofrecer empleos suficientes y dignos para su población? Cada despido de un trabajador o cierres de fábrica son puestos de trabajo que nos roban. El puesto de trabajo no es un patrimonio individual sino social, mantenido por generaciones de trabajadores y no podemos permitir que se destruya porque se está destruyendo nuestro propio futuro. Tal situación afecta al conjunto de la clase obrera, por eso debemos luchar todos por nuestras reivindicaciones de clase como actuales o futuros trabajadores. La defensa del empleo es una de las reivindicaciones más importantes, por eso los marxistas exigimos:

  • Ninguna discriminación salarial por razón de edad o sexo.
  • Por un salario mínimo de $ 7 mil pesos.
  • Jornada laboral de 30 horas sin reducción salarial.
  • Derechos sindicales y laborales para los trabajadores eventuales.
  • Obtención de la base a los 15 días de trabajo.
  • Contra la corrupción, amiguismo y persecución sindical. Control por parte de los comités sindicales, sometido a la ratificación de la asamblea, de las altas y bajas del personal.
  • No a la afiliación sindical obligatoria. Por la libre participación y discusión de ideas en la vida sindical.
  • Jubilación con el 100 % de salario real y cubrir ese puesto con un joven, cobrando cuando menos el salario mínimo profesional con escala móvil de salarios. Jubilación a los 30 años de trabajo sin límite de edad.
  • No a las horas extras. No a la rotación de turnos.
  • Por 30 días de vacaciones pagadas y dos aguinaldos al año equivalentes cada uno a 40 días de salario.
  • 100 % de salario real en caso de enfermedad, accidente o vacaciones.
  • Existencia de comités de seguridad e higiene bajo control obrero en todos los centros de trabajo.
  • Reparto del trabajo entre todas las manos existentes, manteniendo el 100 % de salario real de la jornada si se diera una reducción de la misma.
  • Ni un despido más, por un puesto de trabajo para todos los jóvenes.
  • Plan permanente de obras públicas para la creación de empleo.
  • Seguridad social y transporte gratuito para los trabajadores desempleados.
  • Un puesto de trabajo o un subsidio de desempleo indefinido.
  • Expropiación de los monopolios, transnacionales y bancos sin indemnización y bajo control obrero.

Los trabajadores no tenemos ninguna responsabilidad en la crisis de las empresas, tanto públicas como privadas. Por supuesto la puesta en práctica de este programa necesita recursos. Pero esos recursos están ahí, en la sociedad.

Por ejemplo la sociedad necesita hospitales, escuelas, universidades. Sin embargo esas necesidades no se satisfacen ¿por qué? Porque bajo el capitalismo, impera la lógica del máximo beneficio privado y de ninguna manera la lógica de la satisfacción de las necesidades sociales. Hace falta dinero, pero el dinero está ahí, en los bancos. El dinero no es más que la expresión monetaria de la riqueza de un país. Toda la riqueza acumulada se puede reducir en última instancia a la cantidad de horas de trabajo necesarias para producirla.

En la medida que los trabajadores, los jóvenes, las mujeres nos organicemos bajo la bandera del marxismo será posible llevar a la práctica un auténtico programa socialista.

Mujer trabajadora

Las mujeres trabajadoras sufrimos bajo esta sociedad hipócrita una doble e incluso una triple explo­tación, como mujeres, como trabajadoras y como parte de una minoría oprimida. Somos objeto de una discriminación y una moral absurda, que le reditúa una mayor ganancia a la burguesía por los bajos salarios que percibimos.

Bajo el capitalismo es imposible acabar seriamente con los problemas de la mujer. La discrimina­ción de la mujer es un claro intento de dividir a la clase obrera, manteniendo a las trabajadoras en condiciones de inferioridad permanente. Debemos luchar por mejorar las condiciones de las mujeres trabajadoras, pero hemos de ser conscientes que la única forma de acabar totalmente con la explota­ción que sufre la mujer trabajadora es poniendo fin a la explota­ción que el capita­lismo ejerce sobre el conjunto de los traba­jadores. Luchar por estas reivindicaciones es avanzar en conseguir la unidad de todos los sectores oprimidos.

Únete a nosotros para luchar por:

  • A igual trabajo, igual salario.
  • Guardería, jardín de niños y escuelas primarias gratuitos en cada colonia, barrio y localidad, bien dotadas y subsidiadas por el gobierno bajo control de profesores, padres y organizaciones sindicales.
  • Derecho a guardería gratuita para cualquiera de los padres, decidido por ellos.
  • Licencia de un año por maternidad para cualquiera de los padres, decidido por ellos, recibiendo el 100 % de salario real.
  • Legalización total del derecho al aborto, gratuito y a cargo del Seguro Social.
  • Creación de centros de planificación familiar y atención sexual a la juventud, en todas las colonias y zonas del país.
  • Abolición de todas las leyes laborales o penales discriminatorias para la mujer.
  • Lavanderías, comedores públicos y otros servicios básicos baratos a cargo de las delegaciones políticas en el DF y los ayuntamientos en el resto del país.
  • Comités de fábrica y secciones sindicales que asuman la lucha contra la persecución sexual.
  • Por un divorcio gratuito y sin trabas burocráticas.

Sin duda la revolución socialista por si sola no significará la plena emancipación de la mujer trabajadora, no obstante en un marco democrático y libre de intereses y necesidades económicas, es decir socialista, se sentarán las bases para luchar y lograr una plena equidad de géneros

Trabajadores indígenas

Los trabajadores indígenas y en general, los 10 millones de indígenas del país, están sufriendo una doble explotación en la sociedad capitalista: a la explotación como trabajadores agrícolas o urbanos se les une la discrimina­ción por el color de su piel, por su lengua y hasta por su cultura.

El levantamiento de EZLN puso como primer punto del orden del día el problema indígena, y desde entonces todos han alzado la voz para denunciar las lamentables condiciones de los pueblos indios. Nosotros creemos que el problema indígena no puede ser tratado al margen de los problemas que aquejan a la mayoría del país, y que la solución a la problemática indígena debe incluir la solución a los problemas generales de la clase obrera y demás sectores explotados.

La creación de Comités de Lucha campesinos formados por representantes de organizaciones combativas del campo, así como por miembros nombrados directamente por la comunidad, podría ser un gran instrumento de auto defensa, lucha y enlace con los demás explotados en la ciudad y en otras regiones.

La lucha conjunta es el único camino. El futuro que ofrece el sistema capitalista a los pueblos indígenas es claro: explotación y discriminación en todos los terrenos.

Luchamos por:

  • Fomento de la lengua y la cultura propias (en el campo y la ciudad) para los pueblos indígenas. Creación de escuelas y centros necesarios para ello.
  • Por el derecho a una educación bilingüe en el campo y la ciudad. Cursos y profesores bilingües suficientes en todos los ciclos escolares para una libre elección de la lengua en que se desea la clase.
  • Por la potenciación de la medicina tradicional, complementaría de la farmacológica. A la vez, médicos, centros asistenciales y hospitales públicos necesariamente dotados en todas las comunidades.
  • ¡Libertad a los presos políticos indígenas!
  • Respeto a las formas de organización tradicional de las comunidades indígenas.
  • Formación de grupos de auto defensa campesina nombrados en las asambleas comunitarias en el marco de comités de lucha campesinos que establezcan un control democrático de sus comunidades.

Trabajadores del campo

Los jóvenes jornaleros y campesinos pobres sufren unas condiciones de vida en las zonas rurales peores que en las ciudades. Viven en muchos casos sin agua, luz y otros servicios básicos, en viviendas inadecuadas e insalubres; además cada día se ven obligados a trabajar, muchas veces, hasta ponerse el sol por salarios de hambre.

Pero aunque se tenga tierra, ¿de qué sirve si se tiene una extensión pequeña sin créditos estatales baratos, sin opción a adquirir maquinaria moderna, sin el auxilio de ingenieros agrónomos y con fertilizantes caros?

En el campo estamos actualmente viviendo la gran crisis de su historia. Un proyecto alternativo para el campo debería contemplar por lo tanto, la granja colectiva a gran escala y la producción familiar individual.

La única forma de distribuir los ingresos y poder de compra al campesino pobre es generando empleo en el medio rural por medio del apoyo a la agricultura campesina mediante un sistema de créditos baratos, los cuales no pueden ser proporcionados más que por la banca pública.

No nos oponemos a la introducción de más maquinaria para las labores del campo. Lo que es inadmisible es que esto signifique mayor desempleo. La única salida es repartir el trabajo entre todas las manos existentes, sin reducción salarial y asegurara que en todas las cosechas en que se introduce maquinaria participen el mismo número de jornaleros que en la cosecha anterior, disminuyendo cada vez más la jornada laboral. Los campesinos mexicanos cuentan con una amplia tradición de lucha y resistencia a los planes que han pretendido aniquilarlos.

Por eso los marxistas luchamos por:

  • Una nueva Ley Agraria que rompa con los propósitos privatizadores de la ley aprobada por salinas
  • Un programa de créditos baratos para el campo, gestionados y controlados en comités paritarios por un tercio de trabajadores del campo, un tercio de organizaciones sindicales y un tercio de representación de la administración.
  • Desarrollo integral para el campo contando cada núcleo rural con todos los servicios educativos, comerciales, sanitarios y otros indispensables para evitar la emigración de las zonas rurales.
  • Jornada laboral de 30 horas.
  • Comités de control de precios de garantía formados a partes iguales por campesinos, organizaciones sindicales y la Secretaría de Agricultura.
  • Sanidad al campo. Un centro de salud y un centro de planificación familiar y atención sexual a la juventud por cada pueblo con más de 300 habitantes.
  • Plan agrario de empleo para dar trabajo a todo jornalero mayor de 16 años, controlado por una comisión igualitaria formada por un tercio de los sindicatos, un tercio de trabajadores del campo y un tercio de la administración, debiéndose ratificar su ejecución y cumplimiento en asambleas de campesinos en todo el país.
  • Puesta en práctica de un plan de obras públicas agrario con fondos suficientes para crear puestos de trabajo.
  • Plan de capacitación agrícola que tenga por objetivo el derecho de todo trabajador agrícola a recibir la preparación adecuada.
  • Confiscación de los latifundios y fincas no cultivadas o infrautilizadas.
  • Creación de un organismo nacional que gestione la producción agropecuaria, los precios de garantía y la distribución alimentaría a nivel nacional, con participación de organizaciones campesinas, sindicales y del estado.
  • Por el relanzamiento del ejido como una unidad de producción agroindustrial
  • No al desempleo fruto de la introducción de las maquinarias. Reparto del trabajo existente entre todos los jornaleros por medio de la reducción de jornada sin reducción salarial.
  • Ninguna discriminación salarial ni laboral para la mujer campesina.
  • Expropiación de los latifundios bajo control obrero y sin indemnización, unida a la obtención de créditos baratos por medio de la expropiación de la banca sin indemniza­ción y bajo control obrero.

Por una educación pública, gratuita, científica y democrática

En la sociedad en que vivimos, una minoría de privilegiados es la que controla los medios de producción, la cultura, el arte, la ciencia y también la educación. Ésta refleja cada vez más la división que existe en la sociedad, pues mientras para una minoría hay una educación de élite, la inmensa mayoría, los hijos de los trabajadores, tenemos que soportar una educación pública llena de problemas como carencia de infraestructura, reducción de presupuesto, constante aumento de cuotas, etc.

Para nosotros la política educativa es sólo un eslabón de la política económica del gobierno, se vienen nuevos ataques a la educación pública y los estudiantes debemos estar preparados para responder. Por eso para los marxistas la construcción de una organización estudiantil nacional, permanente, democrática y combativa

A la par de la organización es necesario tener un programa combativo que enfrente los problemas en conjunto y que dé claridad acerca de la orientación del movimiento estudiantil.

Los marxistas luchamos por:

  • Una educación pública gratuita, científica y democrática.
  • Una educación racional, objetiva y laica. Eliminación de toda influencia clerical en el aula
  • Que un porcentaje del dinero que se destina al pago de la deuda externa sea invertido en educación. Gasto mínimo del 10% del PIB en educación.
  • Un aumento del presupuesto a la investigación hasta un 3% del PIB.
  • Una educación pública obligatoria, desde 0 hasta los 23 años.
  • La creación de un sistema de Escuelas infantiles públicas para proporcionar educación gratuita a todos los niños de 0 a 3 años.
  • Un plan de creación de 1 millón de plazas en la educación para los adultos. Por combatir y erradicar el analfabetismo.
  • No a la saturación de las aulas. Por un plan de creación de un millón de plazas nuevas hasta cubrir la demanda en un 100% en todos los niveles educativos
  • Reducción del número de alumnos por aula hasta un máximo de 25.
  • Sistema de becas para los estudiantes hijos de trabajadores, con un monto igual al salario mínimo y otorgamiento sin discriminación por razón de edad, sexo, raza, etc.
  • Gratuidad del transporte, material escolar y comedores para los hijos de los trabajado­res.
  • La creación de casas-residencia para estudiantes fuera de su lugar de origen, a cargo del presupuesto federal, dignas y con todas las condiciones y medios.
  • Apoyo especial (promoción, oportunidad de ingreso, becas, residencia, etc.) a los jóvenes indígenas para realizar estudios en los Centros Universitarios en todas las áreas (Cultura, Arte y Ciencias).
  • El equipamiento del 100% de los centros de estudio con aulas, talleres, laboratorios, bibliotecas, salas de cómputo, auditorio, gimnasio, etc.
  • Un fondo especial para la enseñanza técnica. Por un plan de inversiones cada seis años para la renovación y ampliación de la infraestructura.
  • Un Servicio Social donde no se nos utilice como mano de obra barata. Por la existencia de prácticas en empresas, controladas por estudiantes, profesores libres de horario de clase, comités de empresa y sindicatos obreros, pagándose el 100% del salario mínimo diario.
  • El pase automático a la Universidad y a toda enseñanza Superior. Rechazo a los exámenes de selección y departamentales. Contra la privatización de la educación. No al alza de cuotas. Contra la reducción de la matrícula.
  • La democratización de la enseñanza. Representación paritaria de los alumnos en todos los órganos de gobierno y Consejos (Generales, Técnicos, Académicos, etc.).
  • La creación de Consejos Escolares a nivel local, estatal y nacional con representación paritaria y elección democrática de los representantes.
  • Los plenos derechos democráticos de los estudiantes. Derecho a huelga, asamblea y reunión en horas de clase y a la constitución de instancias de delegados por carreras, departamentos ó consejos de representantes en las Escuelas donde no los exista.
  • Proporcionar a la organización estudiantil locales bien dotados para realizar sus actividades.
  • La creación de una Carta de Derechos y Deberes estudiantiles, general para todos los niveles educativos y de aplicación en todos los centros del país.
  • Erradicación de todo tipo de cuerpos represivos.
  • Contra todo tipo de discriminación por razones económicas, raza, religión, sexo o nacionalidad.
  • El derecho de todo estudiante a recibir educación en la lengua de su comunidad.
  • Por un puesto de trabajo digno al acabar los estudios o un subsidio de desempleo, a cargo del gobierno, mientras se consigue ocupación.
  • Nacionalización de la Banca, la Tierra y las grandes compañías constructoras, sin indemnización y puestas bajo control de los obreros, como única posibilidad de llevar a cabo una campaña urgente de creación de nuevos puestos escolares, escuelas infantiles, de educación básica, media superior y superior para satisfacer las necesidades reales.

Cultura y recreación

Nosotros consideramos que es parte del desarrollo humano, el derecho a una recreación constructiva, a desarrollarnos en las ramas de la cultura donde mejor consideremos. Lamentablemente se nos impone un esquema de cultura y recreación que sólo sirve para preservar los valores, las aptitudes y actitudes que son útiles para preservar este sistema. Para mantener a la población aletargada, crean una serie de valores ajenos totalmente a nuestro desarrollo natural, crean salidas falsas para que no protestemos o luchemos contra la miseria y explotación.

El sistema capitalista se muestra incom­petente para proporcionar a todos las mismas oportunidades para acceder a la cultura y a la diversión. No contentos con explotarnos como mano de obra barata, se nos explota como consumidores cuando buscamos el esparcimiento.

Es necesario aplicar una política que en primer lugar proporcione una vida digna a toda la sociedad, que transforme las colonias de su condición actual en zonas dignas para vivir y que procure un desarrollo integral de los jóvenes. Rechaza­mos el que la cultura siga siendo el privilegio de una élite y una minoría de intelectuales, donde la mayoría sólo seamos meros especta­dores.

Reivindicamos:

  • La construcción de centros de recreación cultural y recreativa en cada colonia para los jóvenes, gra­tuitos y dotados con salas cultura­les, talleres de artes, bibliotecas, clubes juveniles, cines y toda la in­fraestructura necesaria, que estén bajo administración y control de los jóvenes, organizaciones populares y sindicatos obreros.
  • Por un plan de fomento y desarro­llo del deporte. Destinar recursos suficientes para elevar la calidad del deporte y extender su popularidad.
  • Instalaciones deportivas, que cuen­ten con canchas de fútbol, básquetbol, gimnasios, albercas, etc., en todas las colonias y barrios con financia­miento a cargo del GDF y los muni­cipios, administradas por jóvenes y trabajadores.
  • Subsidios suficientes para los centros culturales, clubes juveniles, asociaciones vecinales o inquilina­rias, a cargo del presupuesto federal y municipal, bajo control de organi­zacio­nes juveniles del movimiento popular y sindical.
  • Nacionalización inmediata sin indemnización de los grandes mono­polios de la diversión, como cade­nas de cine, discotecas, teatros boliches, billares, discotecas, mu­seos y televisión. Puesta al servicio de toda esta infraestructura a precios acce­sibles y con orientación social.
  • Control obrero de la industria de la diversión.
  • Poner las instalaciones de creación y difusión de la cultura bajo control de jóvenes y trabajadores. Facilida­des de uso de los estudios de graba­ción a los grupos artísticos que realicen experimentos y proyectos serios en el campo de la música, de la misma forma en el terreno del teatro, pintura, escultura, literatu­ra, etc.
  • Expropiación de fincas y edificios de la burguesía, vacíos o poco utili­zados, para la instalación de los centros juveniles.
  • Alto total a las razzias y represión policíaca en las colonias populares.
  • Creación de Comités de Defensa y Vigilancia en los barrios bajo control de jóvenes y trabajadores de las organizaciones vecinales.

Salud

Mientras cada día disminuye la salubri­dad social, por otra parte aumentan los acci­dentes de trabajo. Las condiciones de trabajo, sin seguridad suficiente y el aumento de los ritmos de producción por los voraces empresa­rios que pretenden ganar más, llevan no sólo a la sobreexplotación sino al aumento de acci­dentes laborales, muertes y enfermedades. El obrero es obligado a trabajar cada vez más rápido y más horas para sobrevivir, generán­dose accidentes debido a la pérdida de concen­tración producida por la fatiga.

Pero la mayoría de los accidentes son en realidad una matanza diaria de trabajadores en beneficio de la acumulación de capital. La única manera de evitar “accidentes” de ese tipo es el control obrero de la producción y acabar con el sistema capitalista.

Ante esto los marxistas exigimos:

  • Seguro Social universal para empleados y desempleados.
  • Creación de un sólo Seguro Social universal bajo control obrero.
  • Socialización de la medicina convirtiendo a ésta en un servicio médico asistencial con gratuidad social de ortopedia, optometría y otros servicios bajo control de una comisión paritaria formada por trabajadores de la sanidad y representantes del Seguro Social.
  • 100% de salario real en caso de enfermedad, accidente, viudez, jubilación o invalidez permanente, con escala móvil de salarios.
  • Programa de extensión de la medicina preventiva (en la fábrica, colonia y escuelas), especialmente entre los niños y los jóvenes.
  • Impulso de la medicina tradicional (fomento y mejoramiento)
  • Por el fomento a la Medicina deportiva
  • Distribución gratuita de medicamentos por parte del Seguro Social bajo control obrero
  • Nacionalización sin indemnización de la industria farmacéutica para planificar la producción de medicinas.
  • Derechos plenos de actuación por parte de los comités de seguridad e higiene en el trabajo ante la violación de la normativa laboral.
  • Control sanitario por parte de los comités de empresas y asamblea de los trabajadores de la calidad alimentaría de los comedores de las fábricas.
  • Plan de extensión de la sanidad rural, con equipo e infraestructura bien dotado en todas las poblaciones rurales.
  • Por una educación sexual plena (sin prejuicios).
  • Abolición total de la medicina privada.
  • Un mayor impuesto al alcohol y cigarros, destinándolo al gasto para el sector salud.

Medio ambiente

Cada día nuestro planeta se encuentra más contaminado. El peligro de terminar con la vida animal, vegetal y humana ya no pertenece a la ciencia ficción.

Bajo el sistema capitalista los avances de la tecnología, la ciencia y la industria no han sido utilizados para mejorar las condiciones de vida de la mayoría de la sociedad sino para aumentar los beneficios de las transnacionales y grandes empresas.

¿Cuántos descubrimientos benéficos para el confort de la sociedad nunca serán puestos ha disposición o en funcionamiento bajo el capitalismo porque ponen en peligro los intereses de las grandes transnacionales y monopolios? Muchas de éstas compran las patentes para evitar que salgan al mercado mientras la contaminación cobra cada día más vidas.

La única forma en que podamos empezar a controlar y eliminar a la contaminación y los problemas que acarrea es por medio de la planificación del desarrollo industrial, de los transportes, etc., poniendo por delante los intereses de la población y no la de obtener ganancias. Esto sólo puede lograrse eliminando el actual orden capitalista e instaurando una sociedad libre de opresión, en donde se de un uso más racional de los recursos de la naturaleza y este sea en beneficio de todos.

Los marxistas luchamos por:

  • Salida inmediata de las empresas más contaminantes del Valle de México bajo control de comités paritarios formados por trabajadores, organizaciones sindicales, comités de fábrica y la administración.
  • Desarrollo de una red de transporte público no contaminante, eficiente, barato y suficiente, bajo control de los sindicatos y la administración gubernamental.
  • Financiamiento de programas alternativos de otras energías no contaminantes (hidráulica, solar, eólica, etc.).
  • Plan anticontaminante nacional financiado por los empresarios en la Iniciativa Privada y por el gobierno en el sector público que acabe con la mayor parte de la contaminación de las industrias.
  • Expropiación sin indemnización de todas aquellas que no cumplan los objetivos previstos.
  • Creación de plantas de reciclaje de residuos suficientes en las principales áreas urbanas bajo control de un comité paritario de las organizaciones sindicales y la administración.
  • Programa nacional para el saneamiento ambiental en tres fases de 6, 12 y 18 años concretado en estudios científicos para la repoblación forestal, regeneración de aguas, fertilización de zonas áridas y otras prioritarias.
  • Plan educacional para la protección del medio ambiente en todos los niveles.
  • Control ambiental de las partículas suspendidas y detección de los principales centros emisores. Control de la acidez de la lluvia.
  • Establecimiento de un corredor aéreo entre las montañas para ventilar el valle de México como una medida de choque para disminuir la contaminación ambiental.

Vivienda

La vivienda es un derecho básico para todo ser humano. Sin embargo, es uno de los principales problemas que tiene la clase obre­ra y los jóvenes en todo el país.

Las malas condiciones de vida, la falta de viviendas y el aumento astronómico de los alquileres, son problemas que afectan a la gran mayoría de la clase trabajadora. La lucha por unas condiciones de vida dignas debe empezar por la lucha por una vivienda digna para todos, como un derecho social.

Ante esto, exigimos:

  • Revisión de la Ley Inquilinaria. Una renta no debe rebasar el 10% de salario mínimo.
  • Plan de dotación de servicios de salubridad a las viviendas sin agua, luz, o condiciones higiénicas, bajo el control de comités formados a partes iguales por organizaciones inquilinarias, de organizaciones sindicales y representantes de la administración.
  • Plan de creación de 2 millones de viviendas anuales.
  • Expropiación de las viviendas vacías o infrautilizadas, sólo en caso de necesidad comprobada con indemnización.
  • Adecuación de la vivienda para minusválidos.
  • Revisión y control obrero del suelo urbano por comités paritarios de trabajadores de la construcción, para los asentamientos irregulares y planificarlos.
  • Planes de crédito público, bajo control obrero, para vivienda a trabajadores con 15 días de ingreso a su centro, sin discriminación por cuestión de ingreso salarial.
  • Alto a los desalojos y contra toda represión.

Únete

La única solución a los problemas de los trabajadores en cualquier parte del mundo, consiste en la ruptura radical con el capitalismo, este es un sistema enfermo y decadente que amenaza el futuro de toda la humanidad, y su sustitución por un nuevo orden social, basado en un sistema de planificación racional y democrático, esa es la verdadera condición para la emancipación de la raza humana: El Socialismo Mundial.

Desde aquí reiteramos la invitación a nuestros lectores a sumarse a Militante y contribuir en este esfuerzo en la lucha por el socialismo.